Foro de Iniciativa Atea

Desconozco cuáles son los mecanismos de nuestro cerebro que nos hacen sentirnos atraídos por la música. La realidad es que debe haber muy pocas personas que puedan considerarse –en grados diferentes- insensibles a ella.

Eso es una obviedad, pero el motivo de este hilo no es desentrañar algo que quizás la ciencia aún desconoce sino plantear lo que considero una incoherencia de mi parte: Me gusta la música religiosa.

No me refiero a los aullidos deplorables que dan los evangélicos en las plazas ni a algunas excelentes obras instrumentales que de religioso suelen tener sólo el título, sino a aquellas cuya pertenencia a un culto (generalmente el cristianismo) es explícito. Por ejemplo, el canto gregoriano o algunas otras piezas corales cuyas letras –casi siempre en latín, que por suerte no entiendo, salvo palabras aisladas- tratan temas de fe.

Podrá decirse que hubo una época en que la Iglesia monopolizaba y controlaba todo y que por ello casi cualquier producto de la ciencia o el arte estaba impregnado de su temática, pero aún así, esa cuestión me hace ruido.

Me gustaría conocer sus opiniones.

Saludos

Y a mí me gustan las catedrales bizantinas. ¿Cuál es el problema?

Vitriólico escribió:Y a mí me gustan las catedrales bizantinas. ¿Cuál es el problema?

No sé si lo hay. Eso es lo que estoy preguntando.

El concepto de belleza es subjetivo, pero ignoro hasta que punto podemos disociar una obra del significado que por experiencia le atribuimos.

En realidad, tampoco sé si tiene sentido decir que la música puede significar algo (más bien creo que no), pero sí que la costumbre nos hace relacionar algunos géneros musicales con ciertas imágenes y no con otras.

Digo esto con la más absoluta incerteza.

Saludos

En el arte, y en especial la música, no se tiene por qué ser racional, hay mucha música inspirada en la religión realmente emotiva. No veo ninguna incompatibilidad con disfrutar de un arte aunque no compartas su mensaje ¿Acaso no se puede admirar la belleza de la capilla sixtina o alguna escultura inspirada en la mitología griega sin tener creencia alguna en la providencia?

A mí me gusta mucho la música americana, el soul proviene del gospel y tanto el blues como el country o el folk tienen muchas veces referencias religiosas, es algo que asumes y a lo que no le das demasiada importancia. Es más, hay versiones del "hallelujah" de Leonar Cohen que me ponen los pelos de punta, y la música de Robert Jonshon no habría tenido tanto impacto sin las referencias al diablo, alimentando la leyenda de haber hecho un pacto con él en un cruce de caminos. Es más, quizá muchos artistas perderían la gracia si fueran más racionales y menos espirituales.

La historia del arte no puede entenderse sin la religión. Y la del arte occidental en concreto sin la religíon cristiana. No hay nada de vergonzoso en admirar la música, arquitectura, pintura, etc. de tema religioso.
Más aún, debe procurarse la conservación en la memoria de los mitos religiosos judeo-cristianos de la misma forma que fueron conservados hasta nuestros días los mitos religiosos grecorromanos, sin los cuales tampoco la historia del arte occidental tendría sentido.
Disfrutemos de la herencia del pasado sin complejos e intentemos trasmitirla. Es nuestra cultura.
Esto puede parecer contradictorio a la difusión del ateismo cuando aún se involucra a los jóvenes del engaño religioso en muchos colegios. Pero la verdad es que me apena la falta de cultura digamos "bíblica" del sector de nuestra juventud que carece de este adoctrinamiento. Más aún, sospecho que incluso el mencionado adoctrinamiento religioso ha eliminado la mayoría los elementos que aportaban elementos histórico-culturales en nombre de una supuesta simplificación y modernidad, y los ha substituido por señuelos supuestamente más atractivos como la vomitiva musiquilla guitarrera que aportan las sectas que acuden a los encuentros papales.
Y en otro género de cosas totalmente distinto, para mí más respetable, está, efectivamente, la atracción por las fuerzas oscuras de, por ejemplo, parte de la música rock más radical. Con su contradictoria carga fuertemente antirreligiosa pero que al mismo tiempo está introduciendo elementos espirituales aunque de signo contrario. Pero eso es otro debate para otro hilo, si procede.

ElFo escribió:

Vitriólico escribió:Y a mí me gustan las catedrales bizantinas. ¿Cuál es el problema?

No sé si lo hay. Eso es lo que estoy preguntando.
...

No. No lo hay.

Si hablamos de gustos, cada uno es soberano en su subjetividad y, por tanto, no hay problema.
Si hablamos de otras cosas, admirarás aspectos de la obra en cuestión de manera más o menos fundada y más o menos coherente. Pero el que haya sido "inspirado" por la religión, por la marihuana, por el nazismo o porque al autor le gustaban sexualmente las ovejas, en mi enfermo entender es un aspecto totalmente secundario que no minusvalora los otros aspectos de la obra.

PD: desde que Andy Warhol -que Alá confunda allí donde esté- pisó este planeta, el arte viró hasta convertirse en la cosa ridícula que es ahora. Y la diferencia fundamental fue precisamente esa: el objeto dejó de tener valor en sí mismo, pasándoselo a las "intenciones " y a la "personalidad" del "artista", que nunca habían importado por ser cuestión ajena a la obra.

Cada vez más de acuerdo con todo lo que dice Vitriólico, eso me preocupa.
Por favor, escribe algo sobre política para tranqulizarme.