Stepinac - Santo Patrono del Genocidio
Soldados de Cristo en el Siglo XX
A pesar de toda las palabrerías de perdón, la Iglesia Católica esta a punto de canonizar a un Santo Patrono del Genocidio. El 4 de Octubre de 1998 el Papa Juan Pablo II viajo a la Republica de Croacia para beatificar a un héroe nacional de ese país (1), Alojzije Stepinac, Arzobispo de Zagreb durante la Segunda Guerra Mundial. Al hacer esto él demuestra el verdadero cometido de la Iglesia Católica de sostener y apoyar su historia, no importa que salvaje y criminal haya sido. Oficialmente, Stepinac fue honrado como mártir de la Iglesia en su más reciente cruzada, la cruzada contra el comunismo. Pero al transformar a este fanático en Santo, el Papa absuelve a Stepinac de su complicidad en los crímenes de genocidio contra los serbios, judíos y romas (gitanos) que tuvieron lugar en el estado títere Nazi de Croacia durante la Segunda Guerra Mundial. Este acto pone en duda la sinceridad de la Iglesia en su reciente publicitada campaña de blanqueamiento de su pasado e historia mediante el pedido de perdón en una forma muy generalizada. Al beatificar a Stepinac el Papa se une en una causa común con aquellos que niegan que jamás haya ocurrido el holocausto.
Al transformar a Stepinac en Santo, la Iglesia Católica trata de enterrar uno de los capítulos más negros de su historia. En Croacia la Iglesia no solamente se desentendió del genocidio que se estaba desencadenando, sino que fue un participe entusiasta y activo. Sacerdotes y monjes fueron protagonistas de atrocidades, los obispos promovían el antisemitismo y difamaban a los serbios al mismo tiempo que judíos y serbios eran exterminados y convertidos a la fuerza a lo largo y a lo ancho de Croacia.. Todo mientras el Vaticano esperaba ver si este experimento social serviría para avanzar sus intereses. La Iglesia todavía no ha pedido perdón y ni siquiera ha reconocido la existencia de este genocidio. Ahora San Stepinac tapa la memoria y su responsabilidad.(2)
lea + en
http://genocidios.faithweb.com/croacia.html
EL OTRO HOLOCAUSTO. EL VATICANO Y EL GENOCIDIO EN CROACIA
La mayor parte de la gente ignora que durante la Segunda Guerra Mundial se produjo otro genocidio cuya brutalidad superó con creces lo visto en los campos de concentración nazis. El asesinato de medio millón de serbios en Croacia ya ha pasado por derecho propio a los anales de los más infames crímenes contra la humanidad. El papel de la Iglesia católica en esta tragedia no fue en absoluto menor.
Cuando Adolf Hitler atacó Yugoslavia el 6 de abril de 1941, resultó inmediatamente evidente que la Wehrmacht contaba con el apoyo de grupos traidores dentro del Estado yugoslavo. El ejército del país estaba entre la espada y la pared, superado por la inmensa maquinaria de guerra alemana y apuñalado por la espalda por terroristas pronazis miembros del Partido Ustasha, una peligrosa organización croata de extrema derecha. Incluso los mandos de algunas unidades de mayoría croata estuvieron en conversaciones con los nazis, abriéndoles prácticamente las puertas del país.1
1. Keegan, John, The Second Worid War, Penguin Books, Nueva York, 1990.
El Estado independiente de Croacia fue declarado el 10 de abril de 1941, el mismo día en que la 14.a división panzer alemana entró en Zagreb y fue recibida con entusiasmo por la población. La invasión de Yugoslavia por parte de las tropas de Hitler supuso la división del país en dos naciones independientes. La católica Croacia veía hecho realidad su sueño de independizarse de la Serbia ortodoxa. En términos de su organización e ideología, el nuevo Estado croata era una nación totalitaria fundada en el principio de un Führer que, siempre que mantuviera su subordinación a Alemania, podía hacer y deshacer a su antojo.
El caudillo que tomó las riendas del país fue Ante Pavelic, jefe de los ustashi. Pavelic y sus seguidores habían estado exiliados en Italia bajo la protección de Mussolini, ya que eran buscados por los gobiernos de Francia y Yugoslavia acusados de planear los asesinatos del rey Alejandro de Yugoslavia y el primer ministro francés Louis Barthou. Pavelic estableció en Croacia, con la ayuda de sus padrinos nazis, el NDH «Nezavisna Drzava Hrvatska» (Estado independiente de Croacia). El 14 de abril, el primado de Croacia, Alojzije Stepinac, se reunía con Pavelic para transmitirle su felicitación al tiempo que repicaban todas las campanas del país para celebrar la victoria. A cambio, Stepinac recibió el nom bramiento de Supremo Vicario Apostólico Militar del Ejército us tashi. La prensa católica se deshacía en halagos hacia el dictador;
Dios, que controla el destino de las naciones y dirige el corazón de los reyes, nos ha dado a Ante Pavelic y ha movido al líder de un pueblo amistoso y aliado, Adolf Hitler, a emplear sus tropas victo riosas para dispersar a nuestros opresores y permitirnos crear un Estado independiente de Croacia. Gloria a Dios, nuestra gratitud a Adolf Hitler, e infinita lealtad al jefe Ante Pavelic.2
2. Manhattan, Avro, Catholic Imperialism ana Worid Freedom, op. cit.
Tal efusión no es de extrañar si tenemos en cuenta que una investigación de la comisión yugoslava de crímenes de guerra estableció que el arzobispo Stepinac había sido uno de los prin cipales actores en la conspiración que condujo a la conquista de Yugoslavia. A fin de cuentas, la Iglesia católica llevaba siglos soñando con la idea de un reino católico en los Balcanes, algo que finalmente sucedió cuando Pavelic y Hitler auparon al trono a Tomislav II, cuya función fue meramente decorativa. La identidad del Estado estaba basada más en afiliación religiosa que en etnicidad. El fanatismo católico de los ustashi estaba decidido a convertir Croacia en un país católico mediante una combinación de conversiones religiosas forzadas, expulsión y exterminio.
EL HÉROE PAVELIC
El clero apoyaba al régimen con entusiasmo fanático. La mayoría de los católicos compartían las metas ideológicas de los ustashi y recibieron con beneplácito el fin de la tolerancia religiosa impuesta por la antigua Yugoslavia. El papa en persona recibió en audiencia a Pavelic y bendijo a toda la delegación de los ustashi desplazada a Roma, incluida la representación de la Hermandad de los Grandes Cruzados, encargados de convertir al catolicismo a los serbios por medio de tácticas que, como veremos, no eran precisamente evangelizadoras.3
3. Bulajic, Milán, The Role of the Vatican in the Break-Up of the Yugoslav State: The Mission of the Vatican in the Independen! State of Croatia: Ustashi Crimes of Genocide (Documents, facts). Ministerio de Información de la República Serbia, Belgrado, 1993.
Durante sus cuatro años de existencia como Estado independiente (1941-1945), en Croacia se ejecutó a más de 750.000 serbios, judíos y gitanos.4 De los 80.000 judíos de Yugoslavia, 60.000 fueron asesinados, la gran mayoría de ellos en Croacia. La mayoría de estas matanzas las cometieron los ustashi. Croacia fue el único país, junto con Alemania, en el que funcionaron campos de concentración a gran escala durante la Segunda Guerra Mundial.
Lea + en...
http://www.bibliotecapleyades.net/vatic ... %20CROACIA
http://www.angelfire.com/extreme/genio/ ... dotes.html
Sobre Nazis, Oro y Sacerdotes
ROMA — En los últimos meses, han sido descubiertas en bancos de Suiza, Suecia, Portugal y otras naciones neutrales las riquezas que los Nazis robaron de sus victimas. Estas instituciones secretamente guardaban el oro robado. También habían estado involucradas en el lavado del mismo para adquirir material de guerra. Pero uno de los cómplices brilla por su ausencia, El Vaticano Se ha negado rotundamente en cooperar con la investigación. Ha cerrado el acceso a sus archivos a pesar de los pedidos de varias naciones y de grupos judíos.
Se espera que Stuart Eizenstatde de la Secretaria de Estado de Estados Unidos presente un reporte sobre las transacciones financieras del Vaticano durante la guerra. La acumulación de evidencia sugiere que el botín de los Ustasha (el gobierno Croata pro Nazi y clero fascista durante la guerra) fue llevado al Vaticano mediante sacerdotes Católicos. Este dinero fue usado para proteger y enviar a los criminales de guerra a Sudamérica.
De 1941 a 1945, los Ustasha exterminaron aproximadamente a 500,000 serbios, judíos y gitanos después de haberle robado sus propiedades y pertenencias. Le obligaron a los judíos de Zagreb el pago de 1,000 kilogramos de oro pese a esto los mataron de todas formas en los campos de concentración. La Iglesia Católica estaba fuertemente ligada a los Ustasha. Al principio del régimen, los sacerdotes católicos administraban las conversiones en masa de serbios mientras que los franciscanos diseminaban propaganda.
Muchos altos oficiales de la Iglesia fueron juzgados y condenados por crímenes de guerra. Entre ellos podemos contar al Padre Dragutin Kamber, quien ordenó la matanza de casi 300 serbios ortodoxos, "el verdugo de los serbios", el Obispo Ivan Saric de Sarajevo y el Obispo Gregory Rozman de Eslovenia, buscado como colaborador Nazi. En un juicio en el año 1946 resultaron convictos media docena de sacerdotes Ustasha, entre ellos el Fraile Franciscano Miroslav Filipovic Majstorovic, Comandante del campo de concentración donde los Ustashas torturaron y asesinaron a cientos de miles con una brutalidad que hasta los Nazis se espantaban.
Mientras la cantidad de documentos y pruebas crece, el Padre Krunoslav Draganovic, se perfila como uno de los caracteres más importantes entre todos ellos. El Fraile Franciscano fue un alto oficial del Comité Ustasha que organizaba las conversiones a la fuerza de los serbios. En 1943, los Ustasha arreglaron con la Iglesia la transferencia de Draganovic al Vaticano. Allí sirvió a la Iglesia en un seminario de Monjes Croatas que era un centro clandestino de actividad Ustasha. Se transformó en el emisario “no oficial” de los Ustasha en el Vaticano y el vínculo con la organización Vaticana de ayuda de refugiados de guerra. Draganovic y colaboradores como el Padre Golik fueron los responsables de ayudar y proveer a los criminales de guerra Ustasha el apoyo para escapar mediante la falsificación de pasaportes de la Cruz Roja y la creación del “ratline” (“la línea de las ratas”) una vía de escape creada por sacerdotes católicos en diversos países del mundo. Los Ustashas lograron escapar gracias a los esfuerzos de la Iglesia. La mayoría terminaron el Argentina, un país simpatizante de la causa nazi y clero-fascista en esos años. Así la mayoría de la cúpula Ustasha encontró su libertad.
El día que Alemania capituló, 288 kilogramos de oro fueron removidos del Banco Nacional de Croacia y del Tesoro Nacional. Parte de este oro cayó en manos de Draganovic, mas bien conocido por su sobrenombre "Padre Oro", lo distribuyó entre los soldados Ustasha y los refugiados Croatas. Nunca fue enjuiciado y volvió a Yugoslavia, donde murió en 1983.
El verano pasado un memorando llamó la atención del Departamento de Estado de Estados Unidos. Pero el Vaticano lo negó rotundamente. Otro reporte menciona como los Ustashas llegaron al Vaticano, vivieron en el Vaticano y en la residencia veraniega Papal de Castel Gandolfo; también hace mención sobre las pruebas de Ustashas conduciendo vehículos oficiales del Vaticano en Roma.
El apoyo del Vaticano hacia los Ustasha durante la guerra no era ningún secreto. Insisten en que no tienen nada que ocultar y al mismo tiempo se rehúsan a cooperar con los investigadores negándoles la entrada a los archivos. El Vaticano dice que como regla general, la Iglesia publica sus documentos después de 75 años, pero los investigadores mantienen que ese periodo ya ha pasado.
http://www.vaticanbankclaims.com/
ntroduction to the Vatican Bank Claims
Alperin v. Vatican Bank was originally filed in Federal Court in San Francisco in November 1999. The plaintiffs are concentration camp survivors of Serb, Jewish, Roma and Ukrainian background and their relatives as well as organizations representing over 300,000 Holocaust victims and their heirs.
The plaintiffs seek an accounting and recovery of the Ustasha Treasury that according to the US State Department was illicitly transferred to the Vatican, the Franciscan Order and other banks after the end of the war.
Defendants currently include the Vatican Bank and Franciscan Order. These defendants combined to conceal assets looted by the Croatian Nazis from concentration camp victims, Serbs, Jews, Roma and former Soviet citizens from Ukraine, Belarus, and Russia 1941-1945.
Levy v. CIA is a lawsuit filed under the Freedom of Information Act seeking release of US Intelligence agency files regarding the notorius Vatican spymaster, Fr. Krunoslav Draganovic. New records on Draganovic were released as a result of the successful conclusion of that lawsuit in 200
Ante Pavelic, caudillo Ustasha (nazicatolico) croata en la misa
Arzobispo Stepinac e nazis-ustashas croatas...
monjas y Pavelic
obispo Ivan Saric y Pavelic
cura Giuseppe Amasucci, nuncio Ramiro Marcone y Pavelic
Pavelic y franciscanos
propaganda catolica Ustasha