Reflexión acerca del orgullo gay y la semana santa
Publicado: Mar Oct 05, 2010 11:58 am
Es bien sabido por todos de lo tremendamente ofendido que se siente el colectivo católico cuando se celebran las cabalgatas del Orgullo Gay. Se sienten ofendidos basándose en que quieren proteger a sus hijos del "mal ejemplo" de personas del mismo sexo llamando la atención de múltiples formas, dando muestras de cariño explícito entre ellos en público, e incitando a los demás a que si les apetece, dejen de mirar y se unan a ellos. La mente de los pequeños podría interpretar que ser homosexual es algo bueno y divertido, y su sentido del bien y el mal no está todavía formado como Dios manda (por boca del clero) para distinguir una obra divina de una aberración de la naturaleza.
Yo también quiero proteger a mis hijos. En la celebración católica denominada Semana Santa, se exhiben públicamente imágenes de tortura explícita, desde latigazos hasta la crucifixión, predominando ésta última. No creo que la mente de un niño pequeño esté preparada para procesar semejante expresión de violencia. Además no se realiza solamente un día, sino toda una semana. Los penitentes en ocasiones van descalzos, cosa que además de un mal ejemplo para los niños, es un claro quebrantamiento de las leyes de salubridad y seguridad ciudadana. Además unos señores encapuchados van repartiendo caramelos a los niños sin que puedan ser reconocidos por éstos, y entonces... ¿como vamos a perpetuar la máxima de nuestras mádres "no aceptes caramelos de extraños que llevan droga"? Supongo que es el único método que tienen sus organizadores para hacer que los niños no salgan despavoridos ante tal espectáculo de crueldad explícita.
Día del orgullo gay: Expresiones de cariño políticamente incorrecto, mensaje de integración social, diversión, colorido.
Semana santa: tortura explícita, sufrimiento, esfuerzo inútil, caramelos...
¿Cual diríais que es más peligroso para los niños?
Y os quejáis de la visita del Papa...
Yo también quiero proteger a mis hijos. En la celebración católica denominada Semana Santa, se exhiben públicamente imágenes de tortura explícita, desde latigazos hasta la crucifixión, predominando ésta última. No creo que la mente de un niño pequeño esté preparada para procesar semejante expresión de violencia. Además no se realiza solamente un día, sino toda una semana. Los penitentes en ocasiones van descalzos, cosa que además de un mal ejemplo para los niños, es un claro quebrantamiento de las leyes de salubridad y seguridad ciudadana. Además unos señores encapuchados van repartiendo caramelos a los niños sin que puedan ser reconocidos por éstos, y entonces... ¿como vamos a perpetuar la máxima de nuestras mádres "no aceptes caramelos de extraños que llevan droga"? Supongo que es el único método que tienen sus organizadores para hacer que los niños no salgan despavoridos ante tal espectáculo de crueldad explícita.
Día del orgullo gay: Expresiones de cariño políticamente incorrecto, mensaje de integración social, diversión, colorido.
Semana santa: tortura explícita, sufrimiento, esfuerzo inútil, caramelos...
¿Cual diríais que es más peligroso para los niños?
Y os quejáis de la visita del Papa...