Reglas de la propaganda de Goebbels
Publicado: Vie Abr 19, 2013 7:44 am
Aunque esté destinado a un asunto intrascendente -cuál es la apatía actual del PsoE- este artículo me ha parecido interesantísimo por cuanto narra las reglas que Goebbels aplicaba en su Ministerio de Propaganda del régimen nazi y que son -más o menos- las que utilizan los distintos poderes en la actualidad para propagar las ideas que les convienen. Y a fe que calan en la gente, ¡pardiez!.
Conocerlas es imprescindible para leer correctamente cualquier medio de comunicación actual. A mi juicio, son tan importantes que quizá merecieran alguna referencia fija en el foro. Que lo disfrutéis.
Conocerlas es imprescindible para leer correctamente cualquier medio de comunicación actual. A mi juicio, son tan importantes que quizá merecieran alguna referencia fija en el foro. Que lo disfrutéis.
Goebbels contra el PSOEMarçal Moliné"Como ciudadano me pregunto cada día cómo es posible que cuelen las contradicciones, las tergiversaciones, las falsedades, de algunos políticos. Ya es hora de que eso que me lo pregunte como publicitario. Yo creo que si los publicitarios no solemos hablar del tema de la Propaganda Política es porque tememos dar la sensación de que estamos haciendo política.
Pero el tema es tan serio, y candente y trascendente para nuestra profesión que voy a correr ese riesgo.
Constantemente estamos viendo a nuestro alrededor los efectos de la Propaganda: ya es hora de que nos interesemos por sus técnicas. La propaganda es casi casi lo nuestro, es casi casi publicidad: pero no lo es.
Resulta que hay dos grandes escuelas de Propaganda política, nacidas las dos en la primera mitad del siglo veinte: las concebidas por dos genios en la materia, Lenin y Hitler. Hoy estamos más cerca de la Propaganda de Hitler, conceptualizada en su libro "Mein Kampf" – "Mi Lucha", escrito en 1924 – y desarrollada por Joseph Goebbels, hombre que Adolf Hitler puso a cargo del Ministerio de Propaganda del Tercer Reich y cuya obra se estudia en su "Diario".
Resulta que cuando hice Periodismo, una de las asignaturas de la carrera era precisamente ésta: la Propaganda Política. No es de extrañar: la titulación se impartía entonces en la Escuela Oficial de Periodismo, la cual dependía del que se llamó Ministerio de Prensa y Propaganda, un nombre que no deja lugar a dudas acerca de la funcionalidad que en aquellos tiempos del franquismo se pretendía dar al periodista.
Una vez acabado periodismo me pasé a ser publicitario y uno de las primeras cosas que se me ocurrieron para conocer mi nueva profesión fue tratar de ver si podía adaptarle las técnicas de la Propaganda. De ahí que comprara "La Propagande Politique" de Jean-Marie Domenach que había editado Presses Universitaires de France ya en 1950 y ha seguido reeditándose, convertido en un libro de referencia de mención obligatoria en otras obras sobre el tema.
Pero no me sirvió de gran cosa: en seguida me di cuenta de que la publicidad parte de unas reglas del juego ético, y de un respeto al ser humano y a la verdad, que nada tienen que ver con el "todo vale" que caracteriza a la propaganda pura y dura.
En Domenach es en quien voy a basarme principalmente para tratar de relacionar la propaganda que dirigía Goebbels con las situaciones de propaganda política que vivimos aquí y ahora.
Dejo de lado la propaganda leninista "que es una traducción de una táctica" y me centro en la propaganda hitleriana, que es el modelo que más se acerca al que estamos viviendo y que "no está ligada a una proposición táctica, sino que se convierte ella misma en táctica, y es un arte en particular, con sus propias leyes" hasta el punto de que Hitler dijera que "la propaganda nos ha permitido conservar el poder, la propaganda nos dará la posibilidad de conquistar el mundo"... Vamos bien, pensé, porque esa ambición parece estar ligada a personajes y actitudes contemporáneas.
Después de aceptar la definición de Bartlett, según el cual "la propaganda es un intento de influenciar la opinión y la conducta de la sociedad de tal forma que las personas adopten una opinión y una conducta determinadas" voy a tratar de enumerar una serie de Reglas de la Propaganda según Goebbels dejando que sea el lector quien trate de buscar ejemplos de aplicación de las mismas en la trayectoria propagandística del PP para influir sobre la población española y conseguir una situación ventajosa contra el PSOE, y también contra los demás partidos, los nacionalistas, y contra todo aquel que se le ponga por delante.
O sea que los ejemplos, si los hay, los pones tú, los tienes tú en tu recuerdo, en tu hemeroteca mental de noticias de prensa, imágenes de televisión, etcétera.
Una ampliación del tema la puedes encontrar, por ejemplo, en un interesante y documentado estudio de Emma Rodero, Profesora de la Facultad de Comunicación de la Universidad Pontificia de Salamanca, que lo ha colgado de internet, en http://bocc.ubi.pt/pag/rodero-emma-prop ... azismo.pdf" onclick="window.open(this.href);return false;
- 1.- Regla de la simplificación y del enemigo único.- La simplificación es la adopción de una sola idea-eje, o de un solo símbolo. En eso si que estamos de acuerdo los publicitarios.
Una de las formas de simplificar te lleva a la "individualización del adversario": los humanos preferimos enfrentarnos a personas visibles. En consecuencia, se grata persuadirnos de que nuestro verdadero enemigo no es tal o cual partido sino tales o cuales personalidad del partido (Como está haciéndose cada día en nuestro país)
2.- Regla del método de contagio.- Reunir a diversos adversarios en una sola categoría o en un solo individuo... para extender la convicción de que "están todos en el mismo saco" (¿Encuentras ejemplos?)
3.- Regla de la transposición.- Es, según Domenach, una táctica de extraordinaria eficacia psicológica y política. Es el arte del "farol" llevado al límite y consiste en cargar sobre el adversario tus propios errores y defectos.
Seguramente es una de las cosas que te llaman más la atención al leer las noticias y escuchar declaraciones en momentos en que el partido de la oposición ha cometido alguna equivocación evidente: te sorprenden - y te preguntas cómo pueden tener tanto atrevimiento - atacando en vez de atender a la lógica de la defensa, e incluso del reconocimiento del error o de la asunción de responsabilidades.. Bueno, pues ahí lo tienes: lo hacen porque saben que funciona y, en el fondo, tu has visto que si, que les funciona.
Y le funcionaba a Goebbels: "Si no puedes negar las malas noticias, inventa otras que les distraigan"
4.- Regla de la exageración y desfiguración.- Una frase al azar de un político de otro partido, un síntoma sin comprobar, son convertidos sin embargo en pruebas amenazadoras.
Ahí está, por ejemplo, la hábil utilización de citas separadas de su contexto.
5.- Regla dela vulgarización.- Me remito directamente a Hitler en "Mein Kampf": "Toda propaganda debe ser popular, adaptando su nivel al menos inteligente de los individuos a quienes se desea vaya dirigida. De esta suerte es menester que la elevación mental sea tanto menor cuanto más grande la muchedumbre que deba conquistar. La capacidad receptiva de las multitudes es limitada y su comprensión escasa; por otra parte tiene ellas una gran facilidad para el olvido"
6.- Regla de la orquestación.- Los publicitarios sabemos que no es tan sencilla como parece, ya que a algunos anunciantes no hay manera de convencerles de que la primera condición de una campaña o una marca es, como en la propaganda, la repetición infatigable de los temas principales. Y, dado que la repetición pura y simple genera rápidamente el cansancio, hay que mantener el tema central pero presentándolo desde aspectos variados.
Como dijo Goebbels, "la propaganda debe limitarse a un número pequeño de ideas y repetirlas incansablemente, presentadas una y otra vez desde distintos ángulos pero siempre confluyendo sobre el mismo concepto. Sin fisuras ni dudas"
Ahí viene también a cuento esa frase tan conocida del propio Goebbels: "Si una mentira se repite las suficientes veces, acaba convirtiéndose en la verdad"
7.- Regla de la renovación.- Viene a ser una consecuencia de la regla anterior: hay que "sacar" continuamente informaciones y argumentos nuevos a un ritmo tal que cuando el adversario responda el público esté ya alejado.
Las respuestas sucesivas del competidor no consiguen alcanzar el flujo creciente de acusaciones (¿Hace falta que consultes a la prensa para comprobarlo?)
8.- Regla de la verosimilitud.- Consiste en estructurar la creación de argumentaciones lanzando "globos sonda" a través de procedencias y de medios distintos, para poder remitirse a ellos citando esas "fuentes" manipuladas con el objeto de hacer verosímiles las argumentaciones (Se me ocurre mencionar, aunque he prometido no poner ejemplos, que todo el entramado de la entrada en la guerra del Iraq iba trufado de esa regla según se ha ido viendo posteriormente)
9.- Regla de la silenciación.- A veces hay temas propagandísticos que hay que abandonar porque están en clara contradicción con la realidad de los hechos que se van sucediendo (¿recuerdas, eh?)
En estos casos la propaganda no reconoce su error (¿te sorprende cada vez que lo ves practicar, eh?)
Se calla sobre aquellos puntos en los que se está débil.
Las noticias que favorecen al adversario se disimulan.
10.- Regla de la transfusión.- El propagandista eficiente no cree que se pueda hacer la propaganda a partir de cero e imponer a las masas no importa qué idea en no importa qué momento.
"Por regla general la propaganda opera siempre a partir de un substrato preexistente, sea una mitología nacional – dice Domenach – o de un complejo de odios y de prejuicios tradicionales" (Me temo que es por ahí por donde anda el eje de la estrategia de quien está "haciendo bien" su propaganda, ahora, en nuestro país)
"Las fobias y las filias"
Escribió Walter Lippman en "Public Opinión" que "el jefe político empieza a apelar a un sentimiento preponderante de la multitud (...) Lo que cuenta es ligar las propuestas con las palabras, y las asociaciones sentimentales con las actitudes primitivas que están en la multitud"
Es la transformación de esa fuente de energía mental que constituyen los estereotipos preexistentes.
Hitler es muy explícito en esto y utiliza un lenguaje que nos puede resultar hasta machista: "La inmensa mayoría de la gente es tan femenina en lo concerniente a su naturaleza y opiniones, que su pensamiento y acciones se hallan gobernados por sensaciones y sentimientos más bien que por consideraciones razonadas"
11.- Regla de la unanimidad.- Buena parte de las opiniones públicas no son más que una suma de conformismos y no se sostienen más que por la impresión que tiene el individuo de que su opinión es la opinión general, unánimemente profesada a su alrededor.
Por lo tanto, la propaganda puede actuar reforzando esa sensación de unanimidad o creándola artificialmente (¿no has tenido la sensación de que pensabas como todo el mundo y, sin embargo, las urnas te han mostrado una realidad diferente?)
Este es un mecanismo básico de la propaganda.
Algunas manifestaciones de masas, y desfiles de partidos, y de organizaciones o ideologías
tienen por objeto crear la impresión de unanimidad.
Ese es también el rol que se trata de interpretar con el recurso a testimonios de artistas, escritores, deportistas, etc. utilizados como "personalidades piloto"
***
Bueno, pues esto es lo que hay.
Cuando hablamos de prepotencia, cinismo, mentiras etc. por parte del partido en la oposición, en realidad lo que estamos contemplando es Propaganda Política, sofisticada, inteligente y oportuna.
Propaganda "de Manual"
Por el otro lado, no percibimos una clara línea de respuesta a esa fuerza descomunal.
No en el PSOE y tampoco en algún que otro partido.
Y eso me desconcierta y me entristece. Para un publicitario una situación así no tiene gracia. Del mismo modo que no nos gusta que haya mala publicidad.
¿Por qué el PSOE no encuentra un lugar y una réplica, una posición de iniciativa ante la opinión pública?:
1.- ¿Será porque no se da cuenta, no sabe lo que le están haciendo, no conoce las Reglas que le están aplicando sistemáticamente desde hace años?
2.- ¿Será porque no es capaz de crear una iniciativa propia, no es capaz de estructurar una estrategia eficaz? Una Estrategia de propaganda con carácter ético - que puede hacerse, sin caer en el pozo del "todo vale" - pero una Estrategia.
Porque si un partido que quiera gobernar no es capaz de crear y desarrollar una estrategia cuando hace falta, ¿cómo va a gobernar, cómo va a proteger a los ciudadanos?
La estrategia del PP es básicamente previsible, es clásica: como vemos, está en los libros.
Y este es un punto débil porque, como decía Sun Tzú, "en la estrategia siempre ha de haber engañifa. No permitas al enemigo calcular tus preparativos" y, al no existir ese misterio, el PSOE parece que debería escuchar al mismo autor cuando dice "el máximo refinamiento consiste en atacar los planes del enemigo"
En fin, que entre unos y otros me da la impresión de que en este país estamos apañados.
Fuente:
Marçal Moliné
http://netfinances.ikaroo.es/noticias/g ... -21820.htm" onclick="window.open(this.href);return false;