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Sam Elliot

14/12/2009 | EFE.-Londres. El actor estadounidense Sam Elliott ha acusado a los católicos de presionar a Hollywood para que desistan de producir las segunda y tercera partes de la trilogía fantástica de 'La Materia Oscura', informa el vespertino londinense Evening Standard.

Según el periódico, los productores norteamericanos han renunciado al plan de filmar el resto de la trilogía pese al éxito de la primera parte, titulada La Brújula Dorada, hace dos años.

Aquel filme, basado, como el resto de la trilogía, en una obra del escritor británico Philip Pullman y con Elliott, Nicole Kidman y Daniel Craig como protagonistas, irritó a la jerarquía católica, que consideraba que promovía el ateísmo.

En la trilogía de Pullman ('La brújula dorada', 'La daga' y 'El catalejo lacado'), cuya acción transcurre en una serie de mundos paralelos, la heroína, Lyra, combate al Magisterio, una organización maléfica en la que algunos han querido ver a la Iglesia Católica.

Los católicos estadounidenses organizaron un boicot de la película, y el presentador de TV de la cadena estadounidense Fox Bill O'Reilly criticó su estreno en 2007 y lo calificó de "guerra contra la Navidad".

El boicot fue organizado por Bill Donohue, de la Liga Católica para los Derechos Religiosos y Civiles, quien declaró al vespertino londinense: "Estoy encantado de que el boicot haya funcionado. Igual que los productores están en su derecho de hacer la película, yo tengo derecho a protestar".
"El motivo por el que protesté fue el intento engañoso de presentar a los niños cristianos las maravillas del ateísmo por la puerta trasera justo en Navidades. Todo el mundo está de acuerdo en que la versión cinematográfica no era anticatólica, pero cada parte de la trilogía lo es en cada vez mayor medida".

Pullman desestimó esas críticas: "Soy un contador de historias. Si hubiese querido enviar un mensaje determinado, habría escrito un sermón".

Antes del estreno de la primera película de Las Crónicas de Narnia, me leí los 7 libros. Me gustaron mucho y no me extrañaría releerlos en el futuro. El primero de ellos, El León, la Bruja y el Ropero, tiene claras e inequívocas alusiones a la Biblia y a Jesús, pero a pesar de ello la historia está bien relatada, es apasionante y no permite soltar el libro con facilidad. Y no vi a nadie criticando que la película estuviese haciendo "propaganda camuflada del catolicismo" o algo por el estilo.

Me parece un claro signo de intolerancia que los católicos hayan hecho un boicot para impedir la realización de la 2ª y 3ª película, lo cual no me extraña en lo absoluto, pero ciertamente nos deja en claro que aún hay mucho por hacer. Y noticias como ésta las tomo como señal de alerta de una avanzada regresionista para eliminar la libertad de expresión, en pos de la defensa de creencias que se asumen a sí mismas como incuestionables y que debiesen estar exentas de toda crítica. ¡¡Pero qué sinvergüenzura!!.

Hombre, C.S. Lewis, Tolkien y los Inklings no en vano eran los llamados "católicos de Oxford"...

¡¡El poder del lado oscuro se pone de manifiesto!!



Lo siento mucho por los niños, porque para ellos iban dirigidas esas películas.

Siempre nos quedará el libro, que no se diferencia mucho de la biblia: fantasías animadas de ayer y hoy.