Me presento
Publicado: Dom Ene 25, 2009 11:32 pm
Hola a todos:
Querría primero manifestar de qué manera soy yo ateo. En mis tiempos de estudiante de bachiller en algunos libros de filosofía aparecía el concepto de ateo práctico. Con este concepto se pretendía designar a los agnosticos como unos ateos que aunque no negaban rotundamente la existencia de Dios, la rechazaban en la práctica. Y así es mi ateismo. Me parece muy poco probable la existencia de Dios en su formulación religiosa vigente. Podría admitir la posibilidad de la existencia de algún principio, a mí me gusta más llamarlo "misterio", que se escapara al entendimiento de nuestras limitadas mentes, moldeadas evolutivamente en un entorno específico. Recuerdo que nunca comprendí muy bien porque no era concebible un universo eterno y sin embargo sí se aceptaba que hubiese un ser superior que gozase de tal atributo.
Apoyo la campaña de los autobuses y todas cuantas se realizen con la finalidad de comunicar a todo el mundo que el ateísmo no tiene porque ser trágico, sino muy al contrario, puede ser la vía para una liberación humana profunda.
Querría primero manifestar de qué manera soy yo ateo. En mis tiempos de estudiante de bachiller en algunos libros de filosofía aparecía el concepto de ateo práctico. Con este concepto se pretendía designar a los agnosticos como unos ateos que aunque no negaban rotundamente la existencia de Dios, la rechazaban en la práctica. Y así es mi ateismo. Me parece muy poco probable la existencia de Dios en su formulación religiosa vigente. Podría admitir la posibilidad de la existencia de algún principio, a mí me gusta más llamarlo "misterio", que se escapara al entendimiento de nuestras limitadas mentes, moldeadas evolutivamente en un entorno específico. Recuerdo que nunca comprendí muy bien porque no era concebible un universo eterno y sin embargo sí se aceptaba que hubiese un ser superior que gozase de tal atributo.
Apoyo la campaña de los autobuses y todas cuantas se realizen con la finalidad de comunicar a todo el mundo que el ateísmo no tiene porque ser trágico, sino muy al contrario, puede ser la vía para una liberación humana profunda.