Quién soy yo
Publicado: Mié Sep 30, 2009 8:15 pm
Saludos compañeros del foro. Empezaré con una presentación formal, me llamo Alejandro, nací en Barcelona, pero vivo en Sevilla aunque en breve me mudaré a Madrid. Tengo 22 años, aunque dentro de una semana tendré 23, el 8 de Octubre. Como he leido en el resto de presentaciones (no todas claro) seguiré con la presentación contando como y cuando empecé a no tener creencias basadas en el concepto de fé.
Yo supongo que empecé bastante joven, siempre he tenido mucha afición a la lectura, supongo que por causas de una madre sobreprotectora en mi infancia. Pero lo llevaba bien, además mi padre, que, aunque no cree en la Iglesia si cree en la otra vida (porque dice que tantos males se los tienen que devolver aunque sea en otra) y también cree en cosas como los alienígenas y otros temas de Cuarto Milenio, siempre ha sido un amante de la naturaleza salvaje, la ciencia y la evolución del universo y de nuestro planeta (si, es un poco contradictorio, pero como padre hay que quererlo no?). La cosa es que desde niño me internaron en un colegio de monjas, del cuál salí vapuleado a los 8 años cuando en medio de una clase de religión y pensando en fotos del espacio exterior, dije que no existe el cielo, por tanto no creo en Dios. Se armó una buena, un compañero (maldito chacal...) me delató a la profesora, ésta me llevó a la directora, y de allí a casa con mis padres y a un colegio público. Y entre una cosa y otra acabé despreciando un tanto las cosas de la religión. Seguí creciendo y leyendo sin parar, me encantó la mitologia griega y romana, su historia y sus leyendas; al igual que la mitologia egipcia o la nórdica. Además que cuando creces descubres que esas cosas van bien para ligar, cada uno con su estilo claro. He estudiado ciencias de la información, publicidad y rrpp, y trabajo en marketing para una gran iglesia "Coca Cola". Con todas estas premisas, siempre he sabido que al desarrollar un espiritu crítico tan tempranamente en estas cuestiones, no sería capaz de creer ciegamente en nada, desde las religiones hasta las ideologias, pasando incluso por cosas como la democracia. Todo tiene errores y fallos, hay cosas más prácticas que otras, y cada cosa hasta el fascismo puede tener ciertas ventajas.
Obviamente me mojo y creo en la razón, y después en la ciencia, siempre hablando de ella como el método científico e hipotético que siempre se puede mejorar o discutir, ya que muchos entienden ciencia por tecnología o progreso o avance científico, que normalmente lo suele regir el dinero que se invierte y no una razón lógica. Considero primario el conocerse a uno mismo antes que conocer a los demás y decirles qué es bueno o malo, y suelo ser tolerante con toda clase de opiniones aunque esté totalmente en contra. Como dijo Voltaire: "No estoy de acuerdo con lo que dices, pero daría mi vida porque puedas defenderlo". Por eso entre los libros que me he leido están algunas partes del Corán, partes de la Biblia, el evangelio de San Juan y partes de la Torah, y puedo decir perfectamente que conllevan mucha sabiduria como lo puede tener cualquier libro de filosofia antigua como la de Aristoteles o Marco Aurelio. Me encanta la música de mil estilos menos el flamenco y el cine. Y no me enrollo más porque ya me ireis conocienco como yo a vosotros en los diferentes posts. Sin más, espero que mis ratos para tomarme un café sean más entretenidos a partir de ahora. Nos vemos!
Yo supongo que empecé bastante joven, siempre he tenido mucha afición a la lectura, supongo que por causas de una madre sobreprotectora en mi infancia. Pero lo llevaba bien, además mi padre, que, aunque no cree en la Iglesia si cree en la otra vida (porque dice que tantos males se los tienen que devolver aunque sea en otra) y también cree en cosas como los alienígenas y otros temas de Cuarto Milenio, siempre ha sido un amante de la naturaleza salvaje, la ciencia y la evolución del universo y de nuestro planeta (si, es un poco contradictorio, pero como padre hay que quererlo no?). La cosa es que desde niño me internaron en un colegio de monjas, del cuál salí vapuleado a los 8 años cuando en medio de una clase de religión y pensando en fotos del espacio exterior, dije que no existe el cielo, por tanto no creo en Dios. Se armó una buena, un compañero (maldito chacal...) me delató a la profesora, ésta me llevó a la directora, y de allí a casa con mis padres y a un colegio público. Y entre una cosa y otra acabé despreciando un tanto las cosas de la religión. Seguí creciendo y leyendo sin parar, me encantó la mitologia griega y romana, su historia y sus leyendas; al igual que la mitologia egipcia o la nórdica. Además que cuando creces descubres que esas cosas van bien para ligar, cada uno con su estilo claro. He estudiado ciencias de la información, publicidad y rrpp, y trabajo en marketing para una gran iglesia "Coca Cola". Con todas estas premisas, siempre he sabido que al desarrollar un espiritu crítico tan tempranamente en estas cuestiones, no sería capaz de creer ciegamente en nada, desde las religiones hasta las ideologias, pasando incluso por cosas como la democracia. Todo tiene errores y fallos, hay cosas más prácticas que otras, y cada cosa hasta el fascismo puede tener ciertas ventajas.
Obviamente me mojo y creo en la razón, y después en la ciencia, siempre hablando de ella como el método científico e hipotético que siempre se puede mejorar o discutir, ya que muchos entienden ciencia por tecnología o progreso o avance científico, que normalmente lo suele regir el dinero que se invierte y no una razón lógica. Considero primario el conocerse a uno mismo antes que conocer a los demás y decirles qué es bueno o malo, y suelo ser tolerante con toda clase de opiniones aunque esté totalmente en contra. Como dijo Voltaire: "No estoy de acuerdo con lo que dices, pero daría mi vida porque puedas defenderlo". Por eso entre los libros que me he leido están algunas partes del Corán, partes de la Biblia, el evangelio de San Juan y partes de la Torah, y puedo decir perfectamente que conllevan mucha sabiduria como lo puede tener cualquier libro de filosofia antigua como la de Aristoteles o Marco Aurelio. Me encanta la música de mil estilos menos el flamenco y el cine. Y no me enrollo más porque ya me ireis conocienco como yo a vosotros en los diferentes posts. Sin más, espero que mis ratos para tomarme un café sean más entretenidos a partir de ahora. Nos vemos!
Es un chiste muy malo, pero te mereces el castigo por comparar la Biblia con la sabiduría infinitamente superiror de Marco Aurelio.