Recientemente, se dio a conocer una estadística que muestra la variación de la religiosidad en la Argentina durante los últimos años. Uno podría suponer que la evolución de la sociedad hacia leyes más progresistas, que fueron resistidas ferozmente por la Iglesia (*) debería estar acompañada de un mayor secularismo, pero parece que no:
Porcentaje de creyentes en 2007 = 90; porcentaje de ateos = 10
Porcentaje de creyentes en 2015 = 92; porcentaje de ateos = 8
Claro está que esos números no siempre reflejan exactamente la realidad. Podrá decirse que el papa argentino ha influido en las respuestas o que muchas veces el ateísmo no suele exponerse abiertamente a causa de la desaprobación social (aunque esto último tambíen se aplicaría a las cifras de 2007), pero lo real es que en 8 años los ateos argeninos hemos sufrido una merma del 20 %.
Otra parte del informe discrimina los datos por sexo, edad y condición social. En ninguna de las categorías el porcentaje de creyentes es inferior al 80.
Y un dato interesante: El índice de ateísmo en las clases altas es del 15 %, en las medias 10 % y en las bajas 5 %. Resulta sugestivo que quienes suelen beneficiarse con el aparato religioso sean los que menos adhieren a él.
Mas o menos como los narcotraficantes que venden la droga pero no la consumen.
Saludos
PD: Volviendo al primer punto: 2 % puede parecer poco, pero recuerdo haber leído en algún sitio (¿fue acá?) que hay que cuidarse de los pequeños porcentajes porque indican tendencias, se acumulan y provocan el pernicioso efecto contagio.
(*) Ley de Divorcio hace casi tres décadas, abolición del servicio militar obligatorio, identidad de género, matrimonio igualitario, etc.
Estadística que me avergüenza
Estadística que me avergüenza
Si la libertad significa algo, es el derecho de
decirles a los demás lo que no quieren oír.
George Orwell
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