Fuente. Posteo este texto porque me pareció interesante para iniciar un debate al respecto.OPINIÓN En torno a la fiebre conmemorativa:
Charles Darwin debe morir
Al hablar de "darwinismo" se perpetúa la idea de que la evolución se debe a un solo hombre, un solo libro, una sola "teoría". Al convertir a un maestro en un fetiche sagrado se pierde la esencia de su enseñanza. De modo que ahora debemos matar a Darwin, sostiene este artículo.
Carl Safina
The New York Times
"No te interesan más que la caza, los perros y atrapar ratas", le dijo Robert Darwin a su hijo, "y serás una vergüenza para ti mismo y tu familia". Sin embargo, el hijo irresponsable está por todos lados. Charles Darwin se ha hecho tan famoso que ya no se puede hacer una distinción entre él y la evolución.
Identificar a la evolución con Charles Darwin significa dejar de lado 150 años de descubrimientos, incluyendo la mayor parte de lo que los científicos comprenden acerca de la evolución, como los patrones de la herencia de Mendel (que le dieron a la idea de selección natural de Darwin un mecanismo -la genética- para que funcionara), el descubrimiento del ADN (que le dio un mecanismo a la genética y nos permiten ver los linajes evolutivos), la biología del desarrollo (que le da un mecanismo al ADN), estudios que documentan la evolución en la naturaleza (que convirtió la hipótesis en un hecho observable), el rol de la evolución en la medicina y las enfermedades (dándole inmediata relevancia al tema), y otras cosas más.
Al proponer el "darwinismo" hasta los científicos y autores de materias científicas perpetúan la idea de que la evolución se debe a un solo hombre, un solo libro, una sola "teoría". El maestro budista del siglo IX Lin Chi dijo: "Si encuentran a Buda en el camino, mátenlo", queriendo decir que al convertir a un maestro en un fetiche sagrado se pierde la esencia de su enseñanza. De modo que ahora debemos matar a Darwin.
Al César lo que es del César
A grandes rasgos y finas pinceladas, la evolución trata de que toda la vida está relacionada con una ascendencia común y que las poblaciones cambian de forma con el tiempo. Pero Darwin llegó tarde a la fiesta. Su abuelo y otros ya creían en la evolución de nuevas especies. Los agricultores e investigadores creaban continuamente nuevas variedades de plantas y animales seleccionando a los que sobrevivían para que se reprodujeran, proporcionándole de tal modo a Charles Darwin una idea. Todo lo que Darwin percibió fue que la selección también debía funcionar en la naturaleza.
En 1859, la percepción y evidencias de Darwin se convirtieron en "Sobre el origen de las especies por medio de la selección natural, o la preservación de las razas favorecidas en la lucha por la vida". Pocos saben que publicó ocho libros antes y 10 libros después del "Origen". Escribió textos fundamentales sobre orquídeas, insectos y corales, entre otros temas. Descubrió cómo se forman los atolones y por qué son tropicales.
Démosle crédito al impresionante genio de Darwin. Ninguna mente recorrió con tanta libertad, tan amplia y originalmente las colinas y valles de la existencia. Pero se deben poner ciertos límites razonables a dicho crédito. Circunscribir la evolución a Charles Darwin significa no tomar en cuenta los límites de su época y todo el progreso posterior.
La ciencia estaba en una etapa primitiva en la época de Darwin. Los barcos no tenían motores. El término "dinosaurio" recién fue creado en 1842 por Richard Owen, seis años después del viaje de Darwin en el "Beagle". Darwin ya era adulto cuando los científicos comenzaron a debatir si los gérmenes causaban las enfermedades y si los médicos debían limpiar sus instrumentos. En el Londres de los años 1850, John Snow luchó contra el cólera sin saber que era causado por bacterias. Johann Carl Fuhlrott y Hermann Schaaffhausen recién anunciaron en 1857 que unos huesos poco comunes del valle de Neander en Alemania podían ser los restos de una raza humana muy antigua. En 1860, Louis Pasteur realizó experimentos que finalmente refutaron la teoría de la "generación espontánea", la idea de que la vida surgía continuamente de cosas no vivas.
Darwinismo e ideología
La ciencia ha continuado avanzando. Pero la evolución al parecer está exclusivamente centrada en su fundador. No llamamos a la astronomía "copernicismo" ni a la gravedad "newtonismo". El "darwinismo" implica una ideología que se mantiene fiel a los dictados de un hombre, al igual que el marxismo. Y los "ismos" (capitalismo, racismo, etc) no son hechos científicos. El "darwinismo" implica que los biólogos "creen en" la "teoría" de Darwin. Es como si los científicos hubieran estado repitiendo exactamente lo que dijo Darwin desde 1860, en lugar de cuestionar y verificar sus ideas, o agregar grandes y nuevos conocimientos.
Usar frases como "selección darwiniana" o "evolución darwiniana" implica que debe haber otro tipo de evolución, un proceso que se podría describir con otro adjetivo. Por ejemplo, cuando uno habla de la "física newtoniana" hace una distinción entre la física mecánica que exploró Newton de la física cuántica subatómica. Es debido a ello que la "evolución darwiniana" suscita la pregunta: ¿cuál es la otra evolución?
Volvamos al punto esencial: el diseño inteligente. No estoy diciendo que el darwinismo haya sido el origen del creacionismo, aunque los "ismos" impliquen equivalencia. Pero el término "darwiniano" construyó un escenario en el cual lo "inteligente" podía compartir el centro de la atención.
Charles Darwin no inventó un sistema de creencias. Él tuvo una idea y no una ideología. La idea dio origen a una disciplina, pero no a discípulos. Pasó más de 20 años recopilando y evaluando las pruebas e implicaciones de criaturas similares, pero diferentes, que estaban separadas por el tiempo (fósiles) o el espacio (islas). Eso es ciencia.
Y es por ello que Darwin debe morir.
Herencia y genes
Casi todo lo que comprendemos sobre la evolución apareció después de Darwin, pero no surgió de él. El no sabía nada acerca de las leyes de la herencia o de genética, ambos temas cruciales para la evolución. La evolución ni siquiera fue una idea suya.
El abuelo de Darwin, Erasmus, creía que la vida evolucionaba a partir de un único antecesor. "¿Podemos hacer la conjetura de que un único tipo de filamento vivo es y ha sido la causa de toda la vida orgánica?", escribió en "Zoonomia" en 1794. No podía entender cómo esto era posible.
Charles Darwin fue en busca de ese cómo. Reflexionando sobre la reproducción selectiva de los agricultores, teniendo en cuenta la alta mortalidad de las semillas y animales salvajes, supuso que las condiciones naturales actuaban como un filtro, determinando cuáles eran los individuos que sobrevivían para reproducir a otros individuos como ellos. A este filtro lo llamó "selección natural". Lo que Darwin tenía que decir acerca de la evolución básicamente empieza y termina allí. Darwin tomó el paso más pequeño que iba más allá del conocimiento común. Pero debido a que percibió -correctamente- un mecanismo por medio del cual la vida se diversifica, su percepción adquirió un tremendo poder.
Pero él no fue el único. Darwin había estado incubando su tesis durante dos décadas cuando Alfred Russel Wallace le escribió desde el sudeste asiático, formulando la misma tesis a la que él había llegado por su cuenta. Ante el temor de que Wallace se hiciera de la primicia, los colegas de Darwin organizaron una presentación en público en la que se le diera crédito a ambos. Era una idea para la cual había llegado la hora, con o sin Darwin.
Darwin escribió la obra magna, pero ésta tenía sus peros. La variación individual apuntalaba la idea, pero ¿cómo se creaban las variaciones? Peor aún, la gente pensaba que los rasgos de ambos padres se mezclaban en los hijos. En ese caso, ¿un rasgo exitoso no se disolvería del todo en sólo un par de generaciones? Debido a que Darwin y sus colegas no sabían nada acerca de los genes y la mecánica de la herencia, no podían comprender del todo la evolución.
Gregor Mendel, un monje austríaco, descubrió que en las plantas de arvejas la herencia de los rasgos individuales seguían patrones. Sus superiores quemaron sus papeles tras su muerte en 1884. Sólo después que la "genética" redescubierta de Mendel se encontró con la selección natural de Darwin en la "síntesis moderna" de los años de la década de 1920, la ciencia dio un paso gigantesco hacia la comprensión de la mecánica de la evolución. Rosalind Franklin, James Watson y Francis Crick dieron el siguiente salto: el ADN, la estructura y mecanismo de la variación y la herencia.
El intelecto de Darwin, su humildad ("Es siempre aconsejable percibir claramente nuestra ignorancia") y su clarividencia nos asombran más a medida que los científicos aclaran, con un detalle que él nunca imaginó, hasta qué punto tenía razón.
Pero nuestra comprensión del funcionamiento de la vida a partir de Darwin no nadará en la piscina pública de las ideas hasta que hayamos eliminado el culto del darwinismo. Sólo cuando hayamos reconocido plenamente el siglo y medio subsiguiente de valor agregado podremos apreciar realmente tanto el genio de Darwin como el hecho de que la evolución es el motor de la vida, con o sin Darwin.
Carl Safina es miembro de la Fundación MacArthur, profesor adjunto de la Universidad de Stony Brook y presidente del Instituto Blue Ocean.
En mi opinión, no me parece que la figura de Darwin impida apreciar los avances que él propició. Stephen Hawking es ampliamente reconocido, a pesar de tener un antecesor tan portentoso como Albert Einstein, por dar un ejemplo en donde el "fetiche" (Einstein) pudo tener sucesores... de hecho, Einstein sucedió a otro "fetiche", Isaac Newton. ¿Comentarios?.