Fuente¿Por qué nos enfermamos? Una mirada darwiniana
La Fundación Ciencia y Evolución ha organizado durante 2009 una serie de seminarios en celebración de los 200 años del nacimiento de Charles Darwin, a los que asistirán destacados evolucionistas.El primer seminario, "Medicina y evolución", se realizará este 29 de mayo, con la participación de Randolph Nesse y Paul Ewald.
ENRIQUE JADRESIC
Psiquiatra
Randolph M. Nesse es profesor de psiquiatría y psicología en la University de Michigan, donde dirige el programa Evolución y Adaptación Humana. Ha colaborado con el profesor George Williams en diversos trabajos sobre medicina darwiniana. Experto en medicina evolucionaria, Nesse ha estudiado cómo la selección natural diseñó nuestra capacidad para tener emociones, y por qué las emociones están tan a menudo "des-reguladas", dando lugar a epidemias de depresión y angustia. Su último libro se titula "Por qué nos deprimimos". El doctor Nesse visitará Chile esta semana en el marco de los seminarios organizados en homenaje a Darwin.
La vulnerabilidad del cuerpo humano
-Si la medicina está basada en la biología, y la biología, a su vez, en la evolución, ¿por qué sólo en 1991, con la publicación de su artículo "El Amanecer de la Medicina Darviniana", se da cuenta de la convergencia entre medicina y evolución? ¿Qué factores explican este retraso? ¿Tiene que ver con que la medicina es una profesión y no una ciencia, o se debe a factores históricos y/o culturales?
"La medicina, tal como la ingeniería, es una profesión que utiliza a la ciencia para resolver problemas específicos. De ahí que se haya orientado casi exclusivamente a buscar las 'causas próximas' de las enfermedades. Es decir, a entender cómo funciona el cuerpo y qué ocurre cuando se enferma. Las explicaciones evolucionarias de las enfermedades, es decir, las causas últimas de aquéllas, que es el foco del trabajo que he realizado con el biólogo evolucionario George Williams, no es tan directamente útil para la medicina tradicional. Pero, como hemos dicho en distintos lugares, sí tiene una utilidad práctica, especialmente cuando se hace investigación, cuando se trabaja en la salud pública, y sirve de ayuda a los médicos para entender al cuerpo como un cuerpo, y no como una máquina. Sin embargo, si el objetivo es arreglar algo que se echó a perder, lo primero que se debe hacer es entender cómo funciona y qué fue lo que se estropeó. Saber por qué era vulnerable y se podía echar a perder es muy importante en el largo plazo, pero no tanto en un primer momento".
"También hay otra razón. Muchas personas aún no se han dado cuenta de que cada rasgo humano requiere tanto una explicación evolucionaria (última) como una explicación próxima. Por ello, algunos científicos se imaginan que ambas explicaciones compiten entre sí, o piensan que una explicación próxima es suficiente; otros, que las hipótesis evolucionarias no pueden someterse a pruebas empíricas. Dada la existencia de estos malentendidos, no es sorprendente que el intento de extender la búsqueda de explicaciones evolucionarias para entender cómo las adaptaciones pueden dar lugar a las mal adaptaciones, ha sido un verdadero desafío. Sin embargo, apenas ello es explicado claramente, la mayoría de las personas lo entiende, y muchas se entusiasman ante la posibilidad de entender al cuerpo humano como cuerpo, incluidas sus fallas".
-¿Cuáles son los principales aportes de la perspectiva evolucionaria a la medicina? ¿Es la contribución de dicha perspectiva similar en todos los ámbitos del quehacer médico, o hay áreas donde el aporte es más visible?
"Varias contribuciones de la evolución a la medicina están bien establecidas y plenamente incorporadas. En particular, la genética de poblaciones y los métodos para trazar el origen de las filogenias. También hay una larga tradición de reconocimiento al rol de la selección natural en la evolución de los agentes patógenos, por ejemplo, y al desarrollo de la resistencia a los antibióticos. Extender la perspectiva evolucionaria a las preguntas sobre por qué el cuerpo humano es vulnerable a las enfermedades ha resultado ser una novedad más difícil de transmitir de lo que George Williams y yo anticipamos".
"Como era predecible, las aplicaciones a la genética y a las enfermedades infecciosas han sido bastante más rápidas en extenderse. También se han ido reconociendo las aplicaciones que se pueden hacer a las enfermedades provocadas por el medio ambiente moderno. Pero el objetivo final, de agregar un párrafo para cada enfermedad a cada texto importante de medicina que explique por qué la selección natural hizo que el cuerpo humano fuera vulnerable a esa enfermedad, se ve todavía muy lejano".
"El impacto en psicología y psiquiatría también ha sido importante. Reconocer que las emociones requieren explicaciones evolucionarias, y que las emociones negativas pueden ser útiles en algunas circunstancias, está dando lugar a un rápido progreso en esas áreas".
Las defensas del organismo y su utilidad
-La visión evolucionara conceptualiza ciertos síntomas, como la tos o el dolor, como parte de la solución y no del problema, en la medida en que constituyen mecanismos de defensa; en el primer caso, para eliminar materia extraña de los pulmones y, en el segundo, para evitar las escaras, la infección, etc. Del mismo modo, desde el punto de vista evolucionario se ha sostenido que la fiebre es adaptativa, porque la mayor temperatura corporal facilita la destrucción de los gérmenes. El razonamiento es claro, pero ¿no podría este enfoque, que pudiera entenderse como una invitación a abstenerse de actuar, perjudicar a veces al paciente?
"Una de las mayores contribuciones de la medicina evolucionaria es que nos permite distinguir entre los dos tipos de problemas por los cuales las personas consultan a sus médicos. Unos son defectos del cuerpo, como por ejemplo, la parálisis, el cáncer o los ataques de epilepsia, que no tienen ninguna utilidad y que sólo aparecen como resultado de una falla corporal. Por contraste, otros, como la tos, la fiebre, las náuseas, el vómito y la fatiga son todas respuestas configuradas por selección natural, junto a los mecanismos regulatorios que los acompañan, que se expresan en situaciones para las cuales son útiles".
"Mucha gente, incluso gente brillante, tiende a sacar una conclusión de eso, normalmente en el sentido de que uno no debe interferir con las defensas naturales del cuerpo. Eso es un error. Más bien, debemos incentivar a la gente a razonar según el 'principio del detector de humo', esto es, que si una defensa no tiene grandes costos para el cuerpo normalmente tiende a expresarse incluso cuando no hay un peligro presente, como ocurre con los detectores de humo. Así, uno debe hacer un análisis específico no sólo del mecanismo de defensa en juego, sino también de la persona de que se trata, en la situación particular en que se encuentra, para determinar si la defensa es necesaria y útil en ese caso o no. Ello permite entender que muchas defensas, como la tos o el dolor, son perfectamente normales, pero no necesarias".
"De todas formas, su pregunta es buena. Es demasiado fácil para la gente pasar del reconocimiento de que las defensas son útiles a la conclusión incorrecta que se les debería dejar que sigan su curso sin modificación. El mejor contra-ejemplo es el uso rutinario de la aspirina para prevenir los ataques cardíacos. Pequeñas dosis de aspirina puedan bajar la tasa de esos ataques a la mitad. Entonces, uno se pregunta: ¿por qué la selección natural no hizo que nuestra sangre fuese un poquito más delgada? La respuesta es que en nuestros ambientes ancestrales el entorno era peligroso, y los encuentros con otros individuos lo eran aún más. Ahora, en cambio, las heridas son menos frecuentes, con menos probabilidad de ser fatales, de modo que el adelgazamiento de la sangre otorga una ventaja neta sustancial, especialmente para la gente de más edad".
-Usted es psiquiatra, y ha hecho ver que las clasificaciones actuales de las enfermedades mentales han excluido la consideración del contexto para no perder replicabilidad y que son a-teóricas. ¿Hay algo que la perspectiva evolucionaria pueda aportar en este sentido?
"La motivación para promover diagnósticos operacionalizados (como el del DSM-III) es loable. Antes de ese criterio, el diagnóstico era muy subjetivo. Sin embargo, la gente tiene una fuerte tendencia a imaginar que los diagnósticos de los libros corresponden a distintas enfermedades con una etiología específica. Esto es claramente incorrecto."
"Mi trabajo clínico cambió sustancialmente desde que, finalmente, reconocí que un bajo estado de ánimo era una respuesta útil para las personas atrapadas en alcanzar metas imposibles. Ahora pregunto sistemáticamente por cada área de la vida del paciente para ver cómo están las cosas. Casi la mitad del tiempo, una persona con depresión se verá entrampada buscando un propósito vital específico, inalcanzable. Rara vez la solución es simple. Siempre hay buenas razones para no renunciar, o para que él o ella no tenga éxito. Sin embargo, la base del tratamiento está en entender la situación".
Depresión en Chile
-Estudios transculturales han mostrado que Chile es un país con niveles muy altos de trastornos depresivos y/o ansiosos, en comparación, por ejemplo, con sus vecinos. Usted ha dicho que las emociones son útiles si se expresan en las situaciones para las cuales evolucionaron y que, de otro modo, son anormales. ¿Se atrevería a postular que con alta probabilidad las cifras de depresión y ansiedad que hemos mencionado para nuestro país se deben al acelerado desarrollo de la así llamada economía de mercado emergente, caracterizada por un rápido cambio social y de estilos de vida?
"El estudio de los factores sociales que influyen en las tasas de depresión en distintas culturas y países está recién empezando a desarrollarse. La diferencia en dichas tasas es impresionantemente alta, ocho veces más alta en EE.UU. que en algunos países asiáticos. Muchos estudios simplemente se fijan en los niveles de estrés. Basado en lo que sabemos sobre los estados de desánimo, creo que será más importante ver y averiguar si la depresión es más común en culturas en que las personas más a menudo están atrapadas en perseguir metas inalcanzables. Creo que ese tipo de situaciones es más común en economías capitalistas, pero aún no tengo evidencia sólida al respecto".
Prozac, Wall Street y depresión
-Adam Hanft postula que el alto consumo de antidepresivos tras la crisis de los atentados del 11 de septiembre en Nueva York llevó a los inversores de Wall Street, afincados en esa ciudad y grandes consumidores de dichos fármacos, a tomar más riesgos de los debidos. Helen Fischer sostiene que "los medicamentos aumentan la serotonina en el cerebro, y la serotonina es un neurotransmisor que suprime o disminuye las emociones, lo que significa que es muy probable que las acciones de estos inversores no hayan estado vigiladas por sus emociones, ya que éstas estaban reprimidas por la ingestión de fármacos". ¿Qué opina al respecto?"
"No estoy familiarizado con su trabajo, pero espero que él sí lo esté con el mío. A principios de 2000 escribí un corto artículo, publicado en repetidas ocasiones y comentado en cientos de diarios alrededor del mundo. Se trata de ¿El mercado está tomando Prozac? En relación a la serotonina, tiene muchas funciones diferentes. Es demasiado general decir que simplemente suprime las emociones. En realidad, los antidepresivos probablemente no actúan por la acción directa de la serotonina. Dicho eso, la gente que está tomando medicamentos de tipo ISRS (inhibidores selectivos de la recaptura de serotonina) tiende, efectivamente, a tener respuestas protectoras atenuadas, como ansiedad y estado de ánimo bajo.
Otros dos hechos que se han constatado en los EE.UU. últimamente, en relación a la crisis económica, son que la gente está concurriendo más a las iglesias y, por otro lado, un aumento de la venta de armas de fuego. ¿Desea aventurar alguna hipótesis de por qué están ocurriendo estos dos fenómenos?
"No estaba al tanto de las cifras respecto de un aumento de la asistencia a las iglesias; de hecho, pensaba que estaba ocurriendo lo contrario. Una rápida mirada a las encuestas Gallup muestra que no ha habido cambio. La venta de armas subió ligeramente hace poco, porque la gente teme que los demócratas aumenten las regulaciones al respecto. Éstas son preguntas sobre las que no soy experto.
Algunas partes no las entendí, pero aquello de la perspectiva evolucionaria de la medicina me resulta interesante.