Voy a tratar de ser lo más breve posible...
Algunos pensarán que soy una persona irracional e inmadura, pero la cuestión es que a mí me resulta imposible creer en "Dios", o en Jesús, o en la Vírgen, y todo lo demás. Es como si hubiera algo dentro de mí que me impide creer en todo eso.
Debo destacar que yo soy enormemente afortunada por haber crecido en un hogar donde jamás se me impuso jamás ninguna creencia religiosa. La única enseñanza de ese tipo que se me impartió provino de mi madre: a los seis años me enseñó a rezar el Padrenuestro, cosa natural, diría yo, porque se educó en un colegio de monjas. Después de eso, nunca se me dijo ni media palabra sobre ir a clases de catecismo y/o tomar la primera comunión, y aunque hubiese querido, primero hubiera tenido que pasar por el "sacramento" del bautismo (porque a mi me bautizaron en una iglesia que no sé si era evangélica, bautista o pentecostal, o qué sé yo, con agua de olivo).
Claro que tuve épocas en las que creí en el dios cristiano, pero a los diez u once años ya era atea, aunque a los 12 o 13 me había dado por ir a misa, para "pedirle perdón a Jesús", pero me duró poco: fui a una o dos misas y se me pasó.
Y bueno, anduve dando vueltas y vueltas, hasta que, digamos, me "convertí al ateísmo". Y eso me llevó a crear un foro para jóvenes ateos y agnósticos de toda Latinoamérica, al que están todos invitados: juventudatea.creaforo.org . Allí también encontrarán esta encantadora historia, además de algunas otras cosas; de vez en cuando mis cuatro neuronas se juntan y logro postear algo aceptable.
Me despido, saludos para todos
Ya lo saqué de mi firma.