Vamos a ver, leyendo opiniones, he visto como algunas personas que, en teoría, conocen las históricas barbaries de los clérigos y los actuales abusos e injerencias de muchos de ellos, exponen un miedo irracional hacia esta propuesta de marcha atea, tan legítima como pacífica, basándose únicamente en el ímpetu que, como jóvenes que somos, nos caracteriza.
Sobre el tema del “orgullo Ateo”, al margen de la connotación arrogante que puede llevar la palabra orgullo, porque es cierto que el orgullo ha sido utilizado por arrogantes, como la palabra hermandad ha sido utilizada divinamente para enfrentar a iguales contra otros, no es la arrogancia lo que me lleva a utilizarla, al menos a mi. Lejos de ser arrogante, no estoy escribiendo como presidenta de una asociación atea “Unión de CyberAteos-ForoAteo” que como tal asociación legítimamente reconocida apenas acaba de nacer, ni como responsable de un foro ateo que destaca desde hace años por humilde, sino que escribo como ciudadana, como persona libre que ha sido capaz de desprenderse de las cadenas ideológicas de los dogmatismos.
Hablo simplemente como atea, en tanto que niego exista tal o cual versión de dios que nos pintan, como humanista, en tanto que antepongo lo humano a lo divino y como laica, en tanto que respeto el derecho de cualquier persona a creer en lo que quiera, aunque no comparta sus creencias. Para mi es un orgullo hacerlo, y un derecho poder expresarlo tanto virtualmente, aquí y ahora en un foro ateo como este, como a pie de calle el día 28 de septiembre. Quede claro que yo no puedo hablar por todos los ateos, y no lo hago ni lo haré, sino que hablo por mi. Otra cuestión es que mi punto de vista coincida con lo que opinan otros.
Por lo demás, estamos viviendo momentos históricos en que el hombre científica e intelectualmente es un gigante, pero éticamente es un enano. La hipócrita moral religiosa, y me refiero exclusivamente a la moral judeo-cristiano-islámica (pues es cierto que no podemos meter en el mismo saco a todas las religiones) que se nos impuso tradicionalmente ha malogrado por completo toda ética. Y digo hipocresía por los clerigos, esos que a modo de relevo, con el mismo libro, desde siempre han predicado la paz pero, demostrado está, el hecho es que incitaron, e incitan, a la guerra, con descarado ánimo de lucro. Así ha sido como norma, antes, y también lo es ahora, aunque con distintos métodos. En el pasado todos cruentos. Ahora, utilizando la manipulación allí donde ya no pueden imponer lo salvaje.
Por otro lado, se confunde pasión, o ilusión en conseguir unos objetivos, con fanatismo, con dogmas. Existe pasión, ilusión, ganas, ... pero NO existe ningún dogma ateo, ni uno solo que siquiera se aproxime en comparación con lo religioso. La simple voluntad de diálogo, como así es por nuestra parte, descarta ya de por sí lo fanático.
Tolerar la intolerancia es inaceptable. Un sacerdote no dialoga con un ateo, directa o indirectamente lo condena a lo peor que es capaz de imaginar, al infierno (a su versión de infierno de su versión de dios de turno).
Un sacerdote no dialoga su versión de dios, directa o indirectamente te lo impone como verdad absoluta y saca provecho económico de ello. Así que todo eso sí es fanatismo y genera fanatismo e intolerancia (en unos sitios y en unas épocas con unas consecuencias terribles), así que, por favor, no confundamos los términos.
Para la marcha atea del día 28 de septiembre del 2008, para expresar cosas como estas, no es preciso más que levantarse del cómodo sofá y salir a la calle y concentrarnos en un punto, que es lo vamos a hacer, ni más ni menos. Así de sencillo y así de contundente, aunque no sea por orgullo, sino por que llevamos razón (y razones suficientes, como que, por ejemplo, esto mismo que estoy diciendo, no se puede expresar libremente en todos los sitios con garantia).
También por demás, por mi parte, no me averguenza pedir unión y apoyo para la marcha atea que ha impulsado Juan Carlos Vásquez, al contrario, para mi es un orgullo, sin arrogancia, aunque se me acuse, o se nos acuse, de "orgullo ateo", y así lo pido.
Saludos.
Luisa.
P.D.: Por cierto, esta tarde, como solemos hacer últimamente todos los domingos, nos vemos por el
chat ateo.