SUPREMA INDAGACIÒN -Un examen a un dios principiante-Compartir
Capítulo I
PASEANDO POR LA PLAYA
El edificio parecía ser uno mas de los tantos hoteles cinco estrellas que solían haber en ciertos lugares de turismo caro, frecuentados por infinidad de personas de la alta sociedad... Ubicado en una paradisíaca isla que evoca la zona del caribe en el planeta tierra, ninguna diferencia había entre ese lugar y éste, solo que, por la noche un observador perspicaz, divisaría constelaciones muy distintas a la que se perciben en el mundo anteriormente mencionado y que... habían dos lunas en la bóveda celeste... El clima era sumamente agradable, una suave y tibia brisa que provenía del verde mar acariciaba a los extraños paseantes que tranquilamente caminaban por la ribera mientras esperan la convención que comenzaría en pocas horas y se desarrollaría en el cómodo salón de conferencias que hay en el ala principal del referido hospedaje. Esa convención, esa (Nunca mejor utilizado el término...) “reunión cumbre” era nada mas y nada menos que la que se hacía para evaluar por un consejo supremo que dependía del señor de la galaxia, que a su vez obedecía a los mandatos del gobernador del cúmulo globular de esta región del universo, (Cúmulo que contiene una veintena de galaxias) las creaciones, actos y resoluciones de los Dioses, en este caso, de la Vía Láctea.
Aquella noche los dioses que en las próximas horas serían examinados, paseaban por la rambla pensativos... concentrados... solitarios... salvo uno, al que solo hace un puñado de miles de millones de años (Ayer, para los tiempos del universo en su totalidad...) le fue dada la tarea de crear un nuevo sistema solar en uno de los confines de la galaxia. Paseaba con una bulliciosa cohorte de adulones; alcahuetes e infinidad de personajes que, aprovechando la reunión hicieron el viaje como si fuese una excursión de estudiantes en fin de curso. Santos; papas; profetas; cardenales. Uno se destacaba, era sumamente delgado y con una prolija y recortada barba. Se trataba de Jesús Cristóbal. Nunca quiso que se supiese su verdadero nombre puesto que no era de su agrado, esa era la razón por lo cual hacíase llamar Jesucristo, aunque en los últimos tiempos, seguramente por ver programas de predicadores electrónicos de canales norteamericanos, gustaba que le dijesen: “Yisas...” verdaderamente ridículo...) Lo aprendió de su, por aquellos tiempos, pavoroso adverso: Luciano Fernando, el jefe de los Infiernos; más conocido como Lucifer... A decir verdad... su enemigo hasta que, en un incidente que tuvo hace aproximadamente unos dos mil años, ocasión en que bajó a las regiones dominadas por este demonio... (Era llamado así ya que Lucifer no gustaba de usar corbatas y para no aparentar vulgaridad siempre utilizaba un primoroso moñito al cuello; por esa razón comenzaron a denominarlo por esa característica y, como en los teclados de las computadoras existentes no existían las eñes, en vez de: el hombre “de moño” le quedó “El hombre de monio” y finalmente: “Demonio”...) Al recorrer las instalaciones del averno fue muy bien tratado... el haberlo recibido con una parada militar con bandera y banda, con toque de clarín anunciando su ingreso y una pomposa ceremonia con himnos de paraíso e infierno incluidos, que por supuesto lo emocionaron profundamente, hizo que cambiara el concepto en cuanto al jefe de las tinieblas... En su estadía en los mismos fue agasajado en gran medida, convidado con abundantes y deliciosos banquetes... Los tres días que estuvo en el lugar fueron de continuos agasajos... Bailaron distintos ritmos, especialmente salsa... con el acompañamiento de una afinada orquestita que los músicos del lugar tenían, tomaron mate... bebida a la que Lucifer era muy adepto y que, luego de eso Jesús también lo fué... antes de marcharse recibió un hermoso equipo de mate, de cuero bordado su nombre con hilos de oro... Luego de eso se hicieron grandes amigos, es invitado todos los años, mas precisamente el 22 de noviembre, al asado del día de la música que, como es bien sabido, se conmemora a Santa Cecilia, muy devotos en ese sitio de dicha patrona, a la que asisten todas las autoridades del tártaro; siempre concurre, muy especialmente invitada la santa mencionada. (Esto hizo que la referida santa se enemistara de por vida... lo que en la eternidad, donde la muerte no existe, es mucho decir... con los grandes de la música... Mozart la despreciaba en sumo grado... si se cruzaba con ella silbaba alguna de sus obras mirándola fijamente mientras se tocaba las partes pudendas sin ningún disimulo, Bach, cuando con ella se franqueaba lanzaba atroces imprecaciones e insultos en alemán... Beethoven no solamente que no le iba en zaga sino que, además de las palabrotas caminaba detrás de ella escupiendo y orinando profusamente... (Como buen alemán era gran tomador de cerveza... ) Cada vez que esto sucedía frente a la vista de Jehová sus estruendosas carcajadas podían escucharse en todo el edén. Ninguna santa más aborrecida y repudiada por los músicos del paraíso que la susodicha... Es de comprender, ya que mas mérito hizo hasta el más humilde de los compositores con respecto a la música que la nombrada... Demás está decir que jamás se celebró en el cielo el día de la música el 22 de noviembre... Un año lo hacían el 21 de marzo; día del nacimiento de Bach. Otro el de Beethoven, el 16 de diciembre, también lo hacían el 4 de marzo, cumpleaños de Vivaldi o el 27 de enero, el aniversario de Mozart. Así se quedaba bien con todos los grandes de la música. Volviendo al festejo en los infiernos... Jesús siempre visita el lugar acompañado de su chofer y alguno de sus incondicionales asistentes... (Acostumbra a tener como personal a cargo, a quienes fueron en vida altas autoridades de la iglesia católica en La Tierra, si papas cuanto mejor... Aquellas reuniones siempre se realizan en unas amplias instalaciones, con piletas, quinchos, todo lo que se requiere para pasar un día en compañía de amigos y conocidos... En varias ocasiones acuden mas personas del paraíso con el propósito de com... perdón de jugar un partido de fútbol, los resultados eran aleatorios, un año ganaban los “malos” otro año los “buenos...” Sin embargo eran imposibles de obviar las rencillas del juego, reyertas que, por supuesto eran inmediatamente canceladas cuando la manducatoria estaba lista.
Si alguien me lo pide coloco la continuación...
Un cuentito de mi autoría que pongo a vuestra consideración
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Godterminator
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Re: Un cuentito de mi autoría que pongo a vuestra consideración
Sólo espero que el árbitro del partido haya sido Ateo.
Todos los dioses fueron producto de la ignorancia y la necesidad
Para debatir cristianos en su propio terreno http://www.godmakers.info
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Re: Un cuentito de mi autoría que pongo a vuestra consideración
Yisas caminaba junto a una joven mujer que, no obstante su corta edad, era su madre... Virgen, según ella... Sería por eso su carácter irascible e histérico... podía reconocérsela en todo momento por su chillona voz y sus órdenes hacia todos los que la circundaban... Merece una descripción el carácter y la forma de vestir de dicha señora... (Que como madre de Jesús, de quién el padre es Jehová, sería de este último su esposa... Don Jeoh aborrecía que la confundieran con su consorte... se consideraba un soltero empedernido... si... que tiene un hijo reconocido pero que jamás tuvo nada con la susodicha... Por especial encargo de su retoño es que la acepta en el cargo que tiene... nada más... ) Cuando todos vestían a la moda actual, la señora gustaba de usar unas ridículas capas rígidas (Con un armazón interno de alambre de fardo...) que le cubrían todo el cuerpo... y no solo eso... sino que por las noches encendía unas lamparillas que tenía cosidas en la totalidad de la tela y apetecía de pasear por zonas oscuras haciendo ver las luminosidades de su estrafalario atuendo. En la tierra se presentó así en varias oportunidades perturbando a mas de un impróvido que circulaba por el lugar. Hecho que a Ella le causaba mucha gracia... les decía dos o tres dislates y luego se retiraba a ver, desde la TV (Por cable... por supuesto) en su habitación en el paraíso, los resultados de su aparición en la tierra... si... con eso se divertía mucho (Y se divierte ya que lo sigue haciendo). Pero esa vestimenta no la usa continuamente ya que cuando, por culpa de algún piquete, (Que como bien sabido es, si en La Tierra dificulta trasladarse en automóvil en el cielo también), se le hace imposible abordar cualquier tren urbano por culpa de sus amplias y tiesas vestiduras, (La primera vez que lo intentó emergió del celestial ferrocarril hecha una piltrafa, la capa totalmente ajada, ni que decir de las luces que le birlaron en el trayecto...) por esa razón, luego de esa lamentable y patética experiencia decidió cambiar el gusto por la capa pasando a utilizar simples y sencillos pantalones vaqueros. Esto fue un somero y sucinto pormenor de las características de la referida mujer. Como nota al margen deseo ilustrar que en el cielo existe una intrincada red de autopistas (Todas gravadas con altísimos peajes) las cuales son utilizadas por los bienaventurados, obviamente para trasladarse de un sitio a otro... Las que además son complementadas con también una complejo sistema ferroviario eléctrico que sirve, además de cargas, para el mismo fin, este último es muy utilizado cuando infinidad de beatos, cansados de esperar su ascenso a la categoría de santos forman intransigentes piquetes cortando la circulación en la mayoría de los pasos al centro de la eterna y celestial metrópolis. Hecho que produce la indignación y furia de miles de bienaventurados que tratan infructuosamente de circular por esas vías. (Especialmente los que arribaron al edén en los dos o tres últimos años, fallecidos provenientes de La Tierra, más específicamente de la Argentina.) Por esa razón es muy utilizado el ferrocarril, no obstante este último tiene el inconveniente de que, por ser estatal y estar en vías de privatización, ser de muy mal servicio, atrasos y cancelaciones, sin nombrar los residuos que por dondequiera que se mira existen y ni que decir de la inseguridad que por las noches se sufre en esos vagones carentes de iluminación... asaltos y violaciones son muy comunes especialmente en el conurbano celestial. Gracias a Dios, (Nunca mejor empleado el término...) Él en persona a veces ronda por los sitios mas peligrosos castigando a los vándalos con la condenación eterna puesto que nadie tiene su puesto fijo, ni en la gloria... ni en el infierno. Hecho que hube de describir algunas de las características celestiales continúo con el relato en cuestión...
En total, sin contar a la banda de música que los precedía y el personal de seguridad que en todo momento los custodiaba... eran alrededor de unos cincuenta individuos que rompían con la armonía y el sosiego del lugar... Quien sería examinado, es decir el Dios del precitado sistema solar era el más sosegado, de estatura mas bien baja, (No sobrepasaba el metro con sesenta centímetros...) de contextura pequeña, de rostro bien afeitado pero con signos de haber trasnochado en los últimos tiempos, iba vestido con una colorida camisa tipo guayabera, unos pantalones que le llegaban hasta las huesudas rodillas y unas cómodas pero ridículas sandalias de plástico. (Lo que le producía un insoportable olor en los pies cuando se las quitaba...) Era asediado continuamente por sus acompañantes, los que le pedían favores; le recordaban fechas; le susurraban al oído... ¡Jeoh esto...! ¡Jeoh esto otro...! ¡Jeoh que bien que se lo vé...! ¡Jeoh; no se olvide del ascenso de tal o cual militar...! (Jeoh... tal el apócope de Jehová, su nombre) E infinidad de cosas por el estilo... Adulaciones; lisonjas y requerimientos estaban a la orden del día... Si a eso se le suman las continuas oraciones; solicitudes; encomios; alabanzas; agradecimientos y pedidos de indulgencias que desde la tierra le llegaban, si no fuera que desde hacía ya mucho tiempo había instalado entre este planeta y Él un invisible parapeto que impedía el paso de los sempiternos pedidos; honras; y loas que desde ese demagógico mundo arribaban. Sin nombrar el tufillo a incienso, efluvio que le molestaba en grado sumo. Era muy común oírle decir, antes de instalar aquel etéreo tabique: ¡Que fetidez tan insoportable...! ¿Quién habrá sido el estúpido; el obtuso que entendió que con esos pestilentes vahos podrían sonsacarme alguna gracia...? Lo cierto es que cuando olía esa, (Para Él) pestilencia hedionda, si le pedían que salvara a tal o cual alma del infierno, allí, por toda la eternidad la enviaba de cabeza; si la solicitud era el salvataje de algún club de futbol del descenso... ¡A pique con el mismo...!; ni que hablar cuando de salvar de la muerte a alguien se trataba ya que en las próximas horas moría hasta de un simple resfrío... Y todo esto por oler los pestíferos vahos de emanaciones del gris polvillo dispuestos en cientos de miles de turíbulos en el mundo entero...
Pasearon por la rambla durante horas... (Por supuesto que sin pasar inadvertidos) Cuando sus fuerzas, (Las de todos) comenzaron a flaquear se dirigieron al hotel para descansar hasta la mañana siguiente, momento en que para Jehová sería la “hora de la verdad”... ya que debería rendir cuentas ante el Gran Jurado sobre la creación que le fuera asignada en una recóndita región de la galaxia. Según el resultado del examen seguiría Él como Dios de la zona referida o sería relevado por otro, en ese caso, mas eficaz.
Fin del primer capítulo.
En total, sin contar a la banda de música que los precedía y el personal de seguridad que en todo momento los custodiaba... eran alrededor de unos cincuenta individuos que rompían con la armonía y el sosiego del lugar... Quien sería examinado, es decir el Dios del precitado sistema solar era el más sosegado, de estatura mas bien baja, (No sobrepasaba el metro con sesenta centímetros...) de contextura pequeña, de rostro bien afeitado pero con signos de haber trasnochado en los últimos tiempos, iba vestido con una colorida camisa tipo guayabera, unos pantalones que le llegaban hasta las huesudas rodillas y unas cómodas pero ridículas sandalias de plástico. (Lo que le producía un insoportable olor en los pies cuando se las quitaba...) Era asediado continuamente por sus acompañantes, los que le pedían favores; le recordaban fechas; le susurraban al oído... ¡Jeoh esto...! ¡Jeoh esto otro...! ¡Jeoh que bien que se lo vé...! ¡Jeoh; no se olvide del ascenso de tal o cual militar...! (Jeoh... tal el apócope de Jehová, su nombre) E infinidad de cosas por el estilo... Adulaciones; lisonjas y requerimientos estaban a la orden del día... Si a eso se le suman las continuas oraciones; solicitudes; encomios; alabanzas; agradecimientos y pedidos de indulgencias que desde la tierra le llegaban, si no fuera que desde hacía ya mucho tiempo había instalado entre este planeta y Él un invisible parapeto que impedía el paso de los sempiternos pedidos; honras; y loas que desde ese demagógico mundo arribaban. Sin nombrar el tufillo a incienso, efluvio que le molestaba en grado sumo. Era muy común oírle decir, antes de instalar aquel etéreo tabique: ¡Que fetidez tan insoportable...! ¿Quién habrá sido el estúpido; el obtuso que entendió que con esos pestilentes vahos podrían sonsacarme alguna gracia...? Lo cierto es que cuando olía esa, (Para Él) pestilencia hedionda, si le pedían que salvara a tal o cual alma del infierno, allí, por toda la eternidad la enviaba de cabeza; si la solicitud era el salvataje de algún club de futbol del descenso... ¡A pique con el mismo...!; ni que hablar cuando de salvar de la muerte a alguien se trataba ya que en las próximas horas moría hasta de un simple resfrío... Y todo esto por oler los pestíferos vahos de emanaciones del gris polvillo dispuestos en cientos de miles de turíbulos en el mundo entero...
Pasearon por la rambla durante horas... (Por supuesto que sin pasar inadvertidos) Cuando sus fuerzas, (Las de todos) comenzaron a flaquear se dirigieron al hotel para descansar hasta la mañana siguiente, momento en que para Jehová sería la “hora de la verdad”... ya que debería rendir cuentas ante el Gran Jurado sobre la creación que le fuera asignada en una recóndita región de la galaxia. Según el resultado del examen seguiría Él como Dios de la zona referida o sería relevado por otro, en ese caso, mas eficaz.
Fin del primer capítulo.
Re: Un cuentito de mi autoría que pongo a vuestra consideración
Capítulo II
RECUERDOS DE LA DIVINA
INFANCIA
Jehová, antes de recogerse en su sueño, en ese letargo que precede al mismo, donde no se está ni totalmente dormido ni totalmente despierto, cuando las brumas del amodorramiento se hacen presentes, recordó su infancia en aquel lejano planeta... era uno mas entre tantos que aspiraban a ser dioses algún día... Se hacían patentes en su pensamiento los grandes maestros que le enseñaron los rudimentos de la creación... Aquellos viejos dioses venidos a menos que finalizaban sus prolongadas existencias practicando la docencia en aquellas vetustas universidades de donde (Con suerte) egresarían los excelsos señores para dominar los lugares mas alejados y devaluados de la galaxia. Demás está decir que los Omnipotentes que se encargarían de los destinos de los más importantes distritos del universo, (Es decir, los centrales del norte; no los periféricos del sur...) no se instruían en universidades como esa, (La cual era estatal...) sino las mas lujosas entidades privadas, y con profesores que ejercían, al momento de hacerlo, su potestad divina en alguno de los innumerables sistemas planetarios de los alrededores. (A no mas de tres o cuatro años luz de distancia...) ¡Cuanta diferencia con la que, por su condición económica le tocó a Él...! En las aulas privadas: computadoras de última generación... (Iguales a las que, recién milenios mas tarde se conocerían en La Tierra...). En la estatal: humildes pizarrones y papeles para anotar las lecciones... En la primera: música de fondo en las cátedras, ejecutada por intérpretes en vivo... (Quintetos de cuerdas; organistas; músicos de gran categoría los que, mucho tiempo después, serían destinados a éste o aquel sistema solar... J.S.Bach fué uno de ellos… el que, según lo que le cupo en suerte, tiempo después fue destinado a su región...) En la estatal simples grabaciones... (Cuando no había de música clásica, lo cual era la mayoría de las veces... debían conformarse con unos insólitos y peripatéticos tañidos que, allá por finales del siglo XX se conocieron en La Tierra, -mas precisamente en la Argentina- como “Cumbia villera...”, este género, a fuerza de ser oído tantas veces terminó por gustarle... ) En la privada aire acondicionado, en la estatal ventiladores de techo... (Cuando funcionaban...) Cuartos privados con todos los lujos; cuadras donde se amontonaban cientos de camas. Lujosas piletas de natación; duchas colectivas... Y así... las diferencias entre unos y otros eran abismales... por supuesto que también, en los resultados de las creaciones las disparidades también eran formidables. Claro que los milagros estaban total y absolutamente prohibidos, muy fácil sería crear de la nada un establecimiento con las características de los mejores institutos privados... Pero... ¿Dónde estarían entonces las ganancias de aquellos dueños de los lujosos establecimientos...? Era manifiesto que la voluntad de aquellos se hacía presente en los funcionarios estatales... los que, seguramente coima de por medio, prohibían las creaciones furtivas, las cuales eran castigadas con la expulsión sin contemplaciones de aquel que, luego de aprobar la materia Creación I y conocer los misterios de la misma, se concibiesen de la nada para sí mismo o para también ser aprovechados por sus compañeros, aunque sea un humilde aparato de aire acondicionado para refrescarse por la noche haciéndolo desaparecer por la mañana... (Suceso que de hecho ocurrió en mas de una oportunidad... refrescando a la totalidad de la cuadra, pero castigado solo el que, subrepticiamente logró la creación del mencionado artilugio... De expulsar a todos los que se aliviaron de la canícula con el fresco aire que exhalaba el preciado artefacto, la galaxia se hubiese quedado sin divinidades, por lo menos en los próximos dos o tres millones de años, suceso que, por semejante nimiedad no ameritaba tamaño desajuste universal... Alguien se preguntará... ¿Cómo sabían quién era el creador del, por ejemplo: el equipo de refrigeración...? Muy fácil... una de las características de los aspirantes a dioses era la indiscreción a toda prueba, esto es que, cada uno, sin la menor piedad ni clemencia denunciaba al responsable del ilícito. Solo bastaba que el celador (Un severo uniformado arcángel) entrase y a los gritos pidiese el nombre del transgresor a la norma... Al instante un coro de candidatos a deidades voceaba a coro el nombre del infractor... El que era inmediatamente desalojado de la universidad sin derecho a apelar la sentencia ni por los mejores abogados del sistema... Claro que si alguien (Familiar o amigo...) depositaba en la cuenta del director una determinada cantidad de dinero el caso podía reverse... El hecho por el cual la condición de alcahuete de los aspirantes era proverbial y característico de la totalidad de los mismos era porque, ése que era eliminado podía ser el que, en épocas de exámenes lo desplazara a uno de alguna región importante dentro de la galaxia... Pero no todo estaba terminado en el alejado del curso... Generalmente era aceptado en la universidad de demonios, (Contigua a la misma...) aunque la cual era mucho más estricta en los exámenes de ingreso que la de donde se egresaba con el título de “Dios...” (Pero esa es otra historia...) También esas universidades eran estatales o privadas... con las mismas diferencias que las nombradas anteriormente.
Pensando... imaginando... recordando... Jehová fue ingresando al terreno de los sueños... La noche transcurrió plácidamente para todos los integrantes de la comitiva celestial...
Capítulo III
EL ULTRA SACRATÍSIMO TRIBUNAL
El día esperado llegó, haciendo que uno a uno se despertara de aquel grato descanso... Fueron incorporándose y prestamente se dirigieron a desayunar... Jehová primero se bañó y luego se vistió con su mejor traje... Por supuesto que a medida... (Se lo hacía una modista, no un sastre, era una manera de ahorrar...) Se encontró en el amplio salón del hotel con toda la comitiva ingiriendo ya los primeros alimentos de la jornada... (Difícil seguramente sería la que comenzaba...) Su hijo Jes... perdón... Yisas... estaba prolijamente acicalado, sentado en una mesa apartada, ensimismado frente al monitor de su notboock de última generación y hablando por su teléfono celular consultaba los fondos que estaban a su disposición en la cuenta corriente que poseía en el banco del cual era cliente y que casualmente, en el Hotel que los alojaba tenía una sucursal... (Era el más serio de toda la comitiva...) Luego que Jeoh hubiese de ingerir un escueto y frugal bocadillo a manera de desayuno incorporóse de la mesa en la cual estaba, se dirigió a la de su hijo y ambos, lentamente se dirigieron hacia la salida; debían estar en la sala de audiencias una hora antes de comenzar el conclave inquisitivo, el cual se desarrollaría en la sala de convenciones del mismo hotel en que se alojaban, es decir que pocos metros los separaban del lugar que, según los resultados de la inquisitoria, serían sellado los destinos de ambos... En realidad eran tres los que serían indagados, el Espíritu Santo había quedado, en tanto se efectuase la indagación, al mando del imperfecto y exiguo universo que le tocó en suerte crear al Omnipotente trío; (Así gustaban autodenominarse...) No obstante este último seguiría los avatares del juicio hasta la sentencia final desde una de sus computadoras en su oficina central. Él hubiese querido asistir personalmente, pero debido a su calidad espiritual, es decir, invisible, debía adoptar una forma por la cual podría ser visto ante los jueces. Desde siempre aborreció ser simbolizado como una paloma o una lengua de fuego... ¿A quién pudo ocurrírsele semejante desatino con respecto a su figura...? Era su comentario habitual. Era espíritu puro... Le agradaba compararse con el agua, esto es: Incoloro; inodoro e insípido; además de etéreo, por supuesto... Por lo tanto sin forma ni contornos... En cuanto a la corporización, no pudo ponerse de acuerdo con sus otros dos tercios, (Así apetecía en llamarlos...) y, como alguien tenía que quedarse a cargo en esos días del sistema planetario, decidieron que fuese él quien lo hiciera por ese lapso. Mejor –pensó en el momento de la decisión- Así se evitaría de hacer el viaje con la sarta de adulones; alcahuetes y jactanciosos colaboradores que continuamente asediaban a Jeoh y Yisas... Sobre María su opinión no era la mejor ya que no le era de buen tono su estilo de ser. Desde que se enteró que hace ya mucho tiempo, ella era para los egipcios la diosa de la fertilidad y la maternidad y, por un problema familiar, cuando sucedió la muerte violenta de Osiris, su esposo, con la ayuda del dios Anubis lo embalsamó a su difunto cónyuge, pero después, gracias a los poderes que ella poseía, lo resucitó y ulteriormente llegó a ser el rey del mundo de los muertos... Sucedió que cuando vio que el futuro era del cristianismo, velozmente mudó de tendencia dejando su estatus de diosa y pasando a ser madre de quién, en los próximos milenios dirigiría los destinos de miles de almas... Además, (Según el pensamiento del E.S.) ahora se la daba de casta y pura, pero cuando formaba parte de la trinidad egipcia con Horus y Serapis, dado el carácter libertino de alguno de sus ritos sacerdotales, aceptado de buen agrado por su pueblo egipcio pero no tolerado luego, puesto que fue prohibida en el imperio romano; oportunidad en que se pasó al cristianismo, el que lentamente estaba aflorando en el gran imperio... Ese comportamiento camaleónico le molestaba en sumo grado al E.S. no así a Jeoh y Jesús, quienes sabían aprovechar muy bien de los servicios que la mencionada les prestaba en cuanto a mediadora con los continuos pedios que les provenían desde La Tierra. Ella se encargaba de la mayoría de ellos dejando a las dos divinidades mayores con el tiempo libre para sus quehaceres diarios... Cuando se colocó la pantalla “anti-pedidos” su función menguó... pero no podían dejarla ahora sin ocupación ya que si ocupada era insoportable, sin actividad diaria les sería ciertamente insufrible, por esa razón le asignaron un sitio en el cual las preces; súplicas y plegarias le llegaban sin inconveniente alguno, de esa manera se mantenía atareada. (Por supuesto que esto era algo que ella desconocía absolutamente.)
Luego del breve trayecto ambos dioses se instalaron en las cómodas butacas que les fueran asignadas con anterioridad, estaban rodeados de otros creadores que pasarían por el mismo análisis. En la lista de examinados estaban cuartos, es decir que no debían esperar mucho para pasar al estrado a ser escudriñados por la junta de Grandes Deidades, los que verdaderamente eran dueños del universo en su absoluto e infinito conjunto de miles de millones de galaxias. No como ellos, los que apenas mantenían una diminuta región con un sistema de unos pocos planetas donde solo uno poseía vida inteligente... (Estrictamente solo eso es lo que se le permite crear a un Dios recién obtenida su licenciatura. Debo especificar aquí que entre mas de una Deidad y los abogados terrestres hay un punto de coincidencia; no obstante ser licenciados, al igual que los recién mencionados, solo con este título -Licenciado- apetecen llamarse “Doctores”, pero solo al que haya cursado el postgrado, -Curso arduo y engorroso si los hay-, solo le es lícito el mencionarse como “Doctor en divinidad“ y le es admitido acceder a lugares más cercanos al centro del sistema galáctico y tener sistemas planetarios con más de un mundo con vida intelectual...) en un lejano distrito en los suburbios de la Vía Láctea. Una galaxia, además, de cuarto orden, con solo unos cien mil millones de estrellas, cuando una gran galaxia poseía diez veces más que éstas en su haber. Claro que también las había de menor medida, pero ésas no poseían vida de ninguna naturaleza ni dioses que la comandasen, estaban ahí para la armonía cósmica, una especie de contrapeso para que no se desequilibre el sistema universal en su totalidad.
La amplia sala se está poblando de cada vez mas y mas creadores. Los acompañantes también van arribando, solo que estos se ubican en unas gradas que existen en los costados superiores del recinto. La mayoría se mantiene en silencio, solo un grupo se destaca de los demás, comen garrapiñadas; hablan sandeces en voz alta; se hacen bromas mutuamente. No obstante ser observados con desprecio por el resto de los concurrentes ellos no se amilanan en su proceder, es más... a mas de uno le espetan un agresivo: ¿Y a vos que te pasa gil...? Por supuesto que son ignorados ya que iniciar una riña en tan sacrosanto lugar es absurdo y disparatado... (La mayoría piensa: “Es una lástima que estén desactivados los milagros en este sitio, -Así lo fue desde que una vez sucedió que un Dios degradado hizo evaporar al jurado; desde esa vez, para prevenir hechos desagradables con alguien que no esté de acuerdo con la sentencia dictada se decidió, mediante un sistema electrónico muy complicado inhibir todo prodigio; maravilla; fenómeno o anormalidad cualesquiera que pudiese perjudicar gravemente a los asistentes y en especial al jurado...) ya que si así no fuera los haríamos desaparecer de inmediato...”- pero al momento coligen que de ser así ellos también podrían hacerlo y quien sabe con que milagroso portento nos atacarían...
-¡Viejo! ¡Ya está entrando el jurado...!- Dice Cristóbal en voz baja y mientras lo toca levemente con el codo a su Padre... Éste sale de la modorra en la cual estaba ingresando, deja de cabecear, se limpia con el antebrazo un hilo de baba que le cuelga de su boca y se sienta con aplomo en su butaca.
-¡Atención Señores asistentes...! – Notifica una suave; joven y serena voz femenina; una circunspección sobrenatural invade el ambiente incuestionablemente impaciente y tenso. –Con Ustedes... (La totalidad de los presentes, al momento, uniformemente se incorporó de sus asientos poniéndose de pié...) El ULTRA SACRATÍSIMO TRIBUNAL. Entran cuatro graves y circunspectas personalidades, vestidas con rigurosas togas negras, se arrellanan en sus respectivos puestos y el que parecía ser el mayor dice con solemne y grave voz, lo siguiente:
En los días anteriores hemos juzgado a dioses subalternos de sistemas planetarios secundarios que basan su química orgánica en: Boro; Silicio; Fósforo y Azufre. Elementos estos, como es bien sabido por los presentes (Eso espero... musita imperceptiblemente...) emparentados entre sí;. Por lo tanto, la vida surgida de los mismos es disímil pero no tanto como entre el Radio y el Americio, puesto que sus masas atómicas difieren mucho entre unos y otros. Hoy pasarán al estrado los creadores que utilizaron el carbono, en los días subsiguientes serán examinados los que emplearon el arsénico, mas tarde el selenio y para finalizar el teluro... No deben desconocer que en los anteriores dictámenes de sentencias, de 400 deidades quedaron solo 3 en sus cargos ya que la gran mayoría de las ex divinidades adolecían de gravísimas ineptitudes, las que los llevaron a su inmediata destitución de los cargos mantenidos hasta ese momento. –Un sudor frío corrió en los semblantes del conjunto de los asistentes... solo uno o dos se mantuvieron impávidos, (Tal no era el caso de nuestros ilustres –por lo menos hasta ese instante- conocidos...)- El motivo por el cual hoy solo se escruta a los que obtuvieron vida del carbono es para no atiborrar la sala de entidades vivientes excesivamente disímiles, puesto que, como es bien sabido por todos ustedes... (Un nuevo mutismo invade la multitud...) No es lo mismo un ser viviente derivado del carbono, cuya masa atómica es de 12,011; que uno del silicio, con m.a. de 28,0855; del azufre de 32,066 de la misma o del selenio con m.a. es de 78,96; por nombrar solo algunas... (El elocuente orador no leía, decía su discurso de memoria, es decir que era un verdadero Dr. en Divinidad. Por lo menos la tabla periódica de Mendeleiev la dominaba a la perfección. Por lo tanto, a partir de este momento pasará al estrado el primer Dios a conceptuar. Fue solemnemente citado y un extraño personaje, ubicado no muy lejos de donde ellos estaban pasó al frente. El gran jurado comenzó inmediatamente con la interpelación. Pero los dioses que ejercen nuestra consideración estaban demasiado ansiosos como para prestar demasiado cuidado a lo que sucedía en la encuesta que acontecía en esos momentos. Uno y otro estaban en una categórica concentración, una especie de estado de beatitud excluidos de todo el entorno; como si permaneciesen en otra dimensión.
Expeditamente la enunciación de sus nombres los hizo venir en sí; ya que solo necesitaban la presencia del Dios responsable de los mundos creados, debía ser uno solo el que compareciese, por tal causa Jehová se puso de pié y, con pasos firmes se aproximó al sitio donde sería examinado. (Menos mal que El Espíritu Santo no vino con nosotros; lo hubiese hecho en vano... Pensó Cristóbal...)
Tomó asiento en el taburete designado para los inspeccionados y, luego de un minucioso escrutinio visual de los examinadores una grave voz se oye se hace oír en el recinto anunciando que a continuación se le leerán las evidencias en contra del fiscalizado en cuestión... Ingresa en el estrado mayor un enigmático personaje con una lista en sus manos, se sienta frente al micrófono, lo acomoda para que el mismo quede a pocos centímetros de su boca, se coloca los anteojos bifocales, arregla los papeles en el atril para facilitar su lectura, carraspea y comienza con la locución referida.
-El Dios, a la sazón analizado, es atribuido de las siguientes imputaciones:
1) -Crear vida en el Planeta Tierra antes que el mismo estuviese listo físicamente para albergar tal estructura genética. Consecuencias de tal irresponsabilidad es que anualmente sucumben infinidad de seres por causas naturales varias, las cuales principales son: el acomodamiento de las placas geológicas subterráneas ocasionando terremotos y los furibundos y violentos movimientos de corrientes de aire denominados vendavales; huracanes o tifones; tempestades que, al igual que los primeros, ocasionan incalculables bajas en las poblaciones que los sufren. El creador del referido mundo, para insertar la vida en él, debió aguardar a que el mismo estuviese apto para alojar la sustancia vital, especialmente la inteligente. Y no lo hizo.
2) Los seres creados por Él adolecen de infinidad de irregularidades, insuficiencias que no carecen individuos elaborados por Dioses en sistemas a no mas de cuatro años luz de distancia, por lo tanto, colindantes a su región asignada. Paso a enumerarlas: ausencia del baldaquín auricular para dejar de percibir sonidos; esto produce alteraciones en el sueño: Dentadura demasiado vulnerable a las sustancias glucogenias, obrando en consecuencia en contra de tales elementos de trituración de alimentos. Organismos inermes ante infinidad de bacterias y virus especialmente creados por quien está frente a nosotros; ¿creados con qué fin...? ¿mortificar a los vivientes...? ¿Solazarse con los sufrimientos causados...?
3) Creación, nuevamente sin motivo alguno, de pulgas; garrapatas; piojos; parásitos internos; moscas; mosquitos e infinidad de seres que pareciera que su principal objetivo en la naturaleza es molestar a sus semejantes. Podría suponerse que los mismos, especialmente los últimos, sirven de alimento a batracios y reptiles; estos hubiesen podido alimentarse muy cómodamente, por ejemplo: de vegetales. Las ratas; ratones; lauchas y demás roedores, son muy molestos. Nombraré aquí también a arañas; alacranes y escorpiones, los que también son, para que decirlo, peligrosos en sumo grado... La humanidad hubiese podido arreglárselas muy bien si los mencionados especimenes.
4) Carencia en los seres inteligentes de un órgano para detectar emisiones de luz infrarrojas, (Se lo proveyó a los reptiles...) Inexistencia de otro para localizar campos eléctricos y magnéticos. (Lo otorgado a los tiburones...) Además tuvieron que pasar muchos años desde la creación para que los hombres percibieran y se dieran por enterados de tales manifestaciones.
5) Permitir sin conmoverse, la existencia de individuos extremadamente perversos; los cuales consumaron crueles exterminios de innumerables personas en todas las épocas; pudiendo, con su sola voluntad, finalizar con tales extravíos.
El listado de divinos yerros finalizó en el número 5, dejando en claro el hablante que quedaba a disposición del jurado la totalidad de la lista para poder, si los mismos lo deseaban; ser leída en privado. A continuación, a la deidad en cuestión, luego de hacerle jurar por sí mismo que diría toda la verdad y nada más que la verdad; la siguiente inquisitoria:
-¿Es Ud. el responsable de la creación del sistema solar de nueve planetas realizado en el suburbio XX/220 de la galaxia Vía Láctea...?-
- Efectivamente... Así es...-
- ¿Solo de ese sector, o de alguno más en especial...?-
- Solo de esa región-
- Entonces Ud. peca de arrogante ya que en varias oportunidades hemos podido leer que se hace pasar por el creador de todo el universo... algo infinitamente superior que ni los más prominentes y encumbrados dioses, creadores de galaxias completas y hasta cúmulos globulares, esto es grupos de galaxias, se han citado como autores de lo que no han hecho... ¡¡Y USTED SE PRESENTA COMO EL QUE LO TODO LO HIZO...!!!-
Jehová, al oír esto quedóse inmóvil es su sitio mientras que su hijo se encogía en su butaca, ni que decir de la barra que los acompañaba. Un sublime silencio acompañaba la escena...
-Nunca pensé que estaba mal que mis creados conjeturaran que era yo el que hizo todo lo existente. Desde el planeta Tierra, además del sistema solar, pueden verse muchas regiones del universo, era muy complicado para mí dar a entender que yo había hecho tal cosa y otros dioses otras... En un culto monoteísta como el que impuse eso sería una contradicción...
- Pero solo con no decirlo hubiese sido suficiente.-
Las severas y estrictas miradas de los inquisidores lo agobiaban, estaba seguro que, de seguir el interrogatorio por esos andariveles, le sería muy difícil volver a ocupar su cargo en el imperceptible sistema que le tocó en suerte.
-Ud., con su proceder sentó el precedente de que se puede erigir un sistema donde se instauró la vida inteligente siendo extremadamente irresponsable, por lo tanto este tribunal, tal como lo hizo con anteriores creadores, se retirará a deliberar el destino que le tocará de ahora en más a Ud. y sus seguidores e incondicionales y fervientes partidarios. Se levanta la sesión por cuarenta minutos; luego de dicho intervalo se dará a conocer la sentencia al investigado en cuestión...
Todos los presentes quedáronse alelados; aturdidos. Estupefactos y atónitos por la celeridad del proceso. Imaginaban que el procedimiento duraría mas tiempo del que ocupó en la ocasión el Ultra Sacratísimo Tribunal. Jehová se mantuvo impávido en su sitio; su hijo pretendió distenderse pero lograrlo le fue imposible. No obstante, luego de unos segundos se incorporó y resueltamente encaminándose hacia una de las puertas que comunicaba con uno de los recintos lindantes, en dos zancadas se pierde tras la misma sin observarse el lugar al cual comparece. La barra, (Ya no bulliciosa) que los acompañaba aprovechó los momentos de expectativa para salir, en silencio, desalentados... abatidos algunos, (Los más...) a tomar y comer algo en los despachos de bebidas y alimentos que proliferaban en los alrededores, otros a sentarse a meditar sentándose los numerosos bancos que existían debajo de los frondosos árboles del parque que circundaba el edificio principal del juzgado.
Capítulo IV
LA SENTENCIA
Paulatinamente la sala fue poblándose con los espectadores que, sin duda alguna escucharían con gran atención los resultados de la taxativa e intrínseca indagación; es decir, el inapelable pronunciamiento del Ultra Sacratísimo Tribunal. Sus rostros manifestaban ansiedad... inquietud... preocupación. Calculaban que el desenlace del asunto en cuestión los perjudicaría ampliamente; puesto que consideraban tangible que el veredicto sería inexorable en cuanto al resultado negativo del mismo. Nuevamente el Tribunal Supremo ingresa a la estrado y por segunda vez, ceremoniosamente la concurrencia, Jehová y Yisas incluidos, demostrando a las eminencias sumisión y respeto, al unísono se pone de pié. Óyese de nuevo la serena voz anunciante diciendo con extrema imperturbabilidad...
– Señores presentes... En este efímero intermedio las eminencias han decidido ya la suerte del sondeado en cuestión-
Mientras la totalidad de los presentes nerviosamente toma asiento en sus lugares, Jehová recibe la orden de acercarse al frente para recibir la sentencia definitiva. Se incorpora con parsimonia y con extrema languidez camina los pocos metros que lo separan de la irrisoria peana donde, cuando arriba a ella, impávido accede a la misma y con mirada franca observa a su sacratísimo interlocutor el que a boca de jarro le espeta lo siguiente
- Sr. Dios Jehová... ¿Está preparado para escuchar la sentencia?- Le pregunta quien, indudablemente, era el más importante del sagrado tribunal...
- Estoy preparado... lo estoy...- Responde de pié Jehová estoicamente
- Pues bien... a continuación se procederá a lectura de la misma...-
Un intranquilo murmullo invade el recinto, los presentes, con rasgos de inquietud y preocupación en sus rostros se acomodan en sus sitios preparándose para lo peor... La mayoría, de ser la sentencia desfavorable, debería volver a sus anteriores ocupaciones, esto es; a ganarse el sustento trabajando. El que le hiciera la pregunta, a continuación, ceremoniosamente y sin dejar de observarlo fijamente con una especie de regodeo en la mirada, toma asiento en su arrellanado estrado; Jehová, sin sentarse se dispone a escuchar el veredicto. Luego de unos tediosos segundos de silencio, donde un mutismo absoluto invade el hábitat accede al estrado un hierático personaje, el que, con extrema solemnidad se sitúa frente al micrófono, acomoda unos impresos en un atril, parsimoniosamente coloca sobre sus ojos unos exiguos bifocales, carraspea con displicencia y grandilocuentemente da comienzo a la lectura de la sentencia.
-En el día de la fecha, reunidos que estamos los presentes en este venerable recinto, el cual está notoriamente presidido por el ULTRA SACRATÍSIMO TRIBUNAL, y por voluntad de los nombrados, a continuación se dará a conocer el inapelable fallo emanado del mismo. Por votación unánime se declara que, visto y considerando las pruebas presentadas en la indagación que se desarrolló en la oportunidad que nos convoca; se resuelve proclamar al Dios presente frente a nosotros como... Total y absolutamente idóneo; habilidoso y eficiente en su quehacer como divinidad. Por lo tanto se lo declara apto para seguir por un millón de años mas en su puesto.
Los presentes, al escuchar la buena noticia, hacen que una algazara indescriptible invadiera el recinto, el hablante solicita silencio sin lograrlo, intenta proseguir con la lectura pero el estruendoso jolgorio le hace imposible lograr su cometido. ¡Exaltadas vivas...! ¡Impetuosas Hurras...! Todo es alegría; regocijo y exultación... Se abrazan, forman rondas entre los asientos, saltan, bailotean entre las hileras de butacas, algunos tiran bengalas y estruendosos petardos, los que producen intranquilidad entre el tribunal, hecho este que colma la paciencia de los mismos y ordena al personal de seguridad desalojar la sala. Al momento ingresa una veintena de uniformados provistos de recios bastones que, utilizando la rudeza ponen fin al bullicio y expulsan a los revoltosos fuera del recinto quedando los mismos con abundantes magulladuras y golpes en sus cuerpos. Permanecen dentro del ambiente solamente los concernidos al acontecimiento inquisitorio. Se finaliza con la lectura de la sentencia con disquisiciones burocráticas y se da por finalizado el acto. Se abrazan padre e hijo, se miran fijamente y se felicitan por el satisfactorio resultado. Jehová casi no puede creer lo acaecido, todavía no concibe que, dadas las asperezas de la experiencia pudieron, los inquisidores, emitir un veredicto propicio para su persona... Pero Cristóbal no puede dejarlo sin saber la verdad, así que sin pensarlo demasiado le confiesa lo siguiente.
-Padre... debo revelarle algo... durante el desayuno investigué en mi PC portátil sobre cada uno de los integrantes del ULTRA SACRATÍSIMO TRIBUNAL... con sorpresa compruebo que uno de ellos, el más destacado del grupo transcurrió su vida terrenal en una región al sur de América denominada “Argentina”, en dicha comarca descuella la corrupción, el soborno... el cohecho; la captación de voluntades por medio del dinero son muy comunes en esa enviciada sociedad. Por eso, al enterarme del sistema en que este magistrado se formó no tuve mas que acudir a él y ofrecerle una dádiva (Bastante significativa...) obteniendo al instante su favor en cuanto el dictamen favorable...
Luego de conocido el hecho, ambos, felices por el desenlace del acontecimiento se retiraron hacia las regiones donde son dueños y señores para proseguir por muchos años más con su autoridad absoluta, esperando que en la próxima convocatoria los mismos magistrados sean los integrantes del ULTRA SACRATÍSIMO TRIBUNAL.
FIN
RECUERDOS DE LA DIVINA
INFANCIA
Jehová, antes de recogerse en su sueño, en ese letargo que precede al mismo, donde no se está ni totalmente dormido ni totalmente despierto, cuando las brumas del amodorramiento se hacen presentes, recordó su infancia en aquel lejano planeta... era uno mas entre tantos que aspiraban a ser dioses algún día... Se hacían patentes en su pensamiento los grandes maestros que le enseñaron los rudimentos de la creación... Aquellos viejos dioses venidos a menos que finalizaban sus prolongadas existencias practicando la docencia en aquellas vetustas universidades de donde (Con suerte) egresarían los excelsos señores para dominar los lugares mas alejados y devaluados de la galaxia. Demás está decir que los Omnipotentes que se encargarían de los destinos de los más importantes distritos del universo, (Es decir, los centrales del norte; no los periféricos del sur...) no se instruían en universidades como esa, (La cual era estatal...) sino las mas lujosas entidades privadas, y con profesores que ejercían, al momento de hacerlo, su potestad divina en alguno de los innumerables sistemas planetarios de los alrededores. (A no mas de tres o cuatro años luz de distancia...) ¡Cuanta diferencia con la que, por su condición económica le tocó a Él...! En las aulas privadas: computadoras de última generación... (Iguales a las que, recién milenios mas tarde se conocerían en La Tierra...). En la estatal: humildes pizarrones y papeles para anotar las lecciones... En la primera: música de fondo en las cátedras, ejecutada por intérpretes en vivo... (Quintetos de cuerdas; organistas; músicos de gran categoría los que, mucho tiempo después, serían destinados a éste o aquel sistema solar... J.S.Bach fué uno de ellos… el que, según lo que le cupo en suerte, tiempo después fue destinado a su región...) En la estatal simples grabaciones... (Cuando no había de música clásica, lo cual era la mayoría de las veces... debían conformarse con unos insólitos y peripatéticos tañidos que, allá por finales del siglo XX se conocieron en La Tierra, -mas precisamente en la Argentina- como “Cumbia villera...”, este género, a fuerza de ser oído tantas veces terminó por gustarle... ) En la privada aire acondicionado, en la estatal ventiladores de techo... (Cuando funcionaban...) Cuartos privados con todos los lujos; cuadras donde se amontonaban cientos de camas. Lujosas piletas de natación; duchas colectivas... Y así... las diferencias entre unos y otros eran abismales... por supuesto que también, en los resultados de las creaciones las disparidades también eran formidables. Claro que los milagros estaban total y absolutamente prohibidos, muy fácil sería crear de la nada un establecimiento con las características de los mejores institutos privados... Pero... ¿Dónde estarían entonces las ganancias de aquellos dueños de los lujosos establecimientos...? Era manifiesto que la voluntad de aquellos se hacía presente en los funcionarios estatales... los que, seguramente coima de por medio, prohibían las creaciones furtivas, las cuales eran castigadas con la expulsión sin contemplaciones de aquel que, luego de aprobar la materia Creación I y conocer los misterios de la misma, se concibiesen de la nada para sí mismo o para también ser aprovechados por sus compañeros, aunque sea un humilde aparato de aire acondicionado para refrescarse por la noche haciéndolo desaparecer por la mañana... (Suceso que de hecho ocurrió en mas de una oportunidad... refrescando a la totalidad de la cuadra, pero castigado solo el que, subrepticiamente logró la creación del mencionado artilugio... De expulsar a todos los que se aliviaron de la canícula con el fresco aire que exhalaba el preciado artefacto, la galaxia se hubiese quedado sin divinidades, por lo menos en los próximos dos o tres millones de años, suceso que, por semejante nimiedad no ameritaba tamaño desajuste universal... Alguien se preguntará... ¿Cómo sabían quién era el creador del, por ejemplo: el equipo de refrigeración...? Muy fácil... una de las características de los aspirantes a dioses era la indiscreción a toda prueba, esto es que, cada uno, sin la menor piedad ni clemencia denunciaba al responsable del ilícito. Solo bastaba que el celador (Un severo uniformado arcángel) entrase y a los gritos pidiese el nombre del transgresor a la norma... Al instante un coro de candidatos a deidades voceaba a coro el nombre del infractor... El que era inmediatamente desalojado de la universidad sin derecho a apelar la sentencia ni por los mejores abogados del sistema... Claro que si alguien (Familiar o amigo...) depositaba en la cuenta del director una determinada cantidad de dinero el caso podía reverse... El hecho por el cual la condición de alcahuete de los aspirantes era proverbial y característico de la totalidad de los mismos era porque, ése que era eliminado podía ser el que, en épocas de exámenes lo desplazara a uno de alguna región importante dentro de la galaxia... Pero no todo estaba terminado en el alejado del curso... Generalmente era aceptado en la universidad de demonios, (Contigua a la misma...) aunque la cual era mucho más estricta en los exámenes de ingreso que la de donde se egresaba con el título de “Dios...” (Pero esa es otra historia...) También esas universidades eran estatales o privadas... con las mismas diferencias que las nombradas anteriormente.
Pensando... imaginando... recordando... Jehová fue ingresando al terreno de los sueños... La noche transcurrió plácidamente para todos los integrantes de la comitiva celestial...
Capítulo III
EL ULTRA SACRATÍSIMO TRIBUNAL
El día esperado llegó, haciendo que uno a uno se despertara de aquel grato descanso... Fueron incorporándose y prestamente se dirigieron a desayunar... Jehová primero se bañó y luego se vistió con su mejor traje... Por supuesto que a medida... (Se lo hacía una modista, no un sastre, era una manera de ahorrar...) Se encontró en el amplio salón del hotel con toda la comitiva ingiriendo ya los primeros alimentos de la jornada... (Difícil seguramente sería la que comenzaba...) Su hijo Jes... perdón... Yisas... estaba prolijamente acicalado, sentado en una mesa apartada, ensimismado frente al monitor de su notboock de última generación y hablando por su teléfono celular consultaba los fondos que estaban a su disposición en la cuenta corriente que poseía en el banco del cual era cliente y que casualmente, en el Hotel que los alojaba tenía una sucursal... (Era el más serio de toda la comitiva...) Luego que Jeoh hubiese de ingerir un escueto y frugal bocadillo a manera de desayuno incorporóse de la mesa en la cual estaba, se dirigió a la de su hijo y ambos, lentamente se dirigieron hacia la salida; debían estar en la sala de audiencias una hora antes de comenzar el conclave inquisitivo, el cual se desarrollaría en la sala de convenciones del mismo hotel en que se alojaban, es decir que pocos metros los separaban del lugar que, según los resultados de la inquisitoria, serían sellado los destinos de ambos... En realidad eran tres los que serían indagados, el Espíritu Santo había quedado, en tanto se efectuase la indagación, al mando del imperfecto y exiguo universo que le tocó en suerte crear al Omnipotente trío; (Así gustaban autodenominarse...) No obstante este último seguiría los avatares del juicio hasta la sentencia final desde una de sus computadoras en su oficina central. Él hubiese querido asistir personalmente, pero debido a su calidad espiritual, es decir, invisible, debía adoptar una forma por la cual podría ser visto ante los jueces. Desde siempre aborreció ser simbolizado como una paloma o una lengua de fuego... ¿A quién pudo ocurrírsele semejante desatino con respecto a su figura...? Era su comentario habitual. Era espíritu puro... Le agradaba compararse con el agua, esto es: Incoloro; inodoro e insípido; además de etéreo, por supuesto... Por lo tanto sin forma ni contornos... En cuanto a la corporización, no pudo ponerse de acuerdo con sus otros dos tercios, (Así apetecía en llamarlos...) y, como alguien tenía que quedarse a cargo en esos días del sistema planetario, decidieron que fuese él quien lo hiciera por ese lapso. Mejor –pensó en el momento de la decisión- Así se evitaría de hacer el viaje con la sarta de adulones; alcahuetes y jactanciosos colaboradores que continuamente asediaban a Jeoh y Yisas... Sobre María su opinión no era la mejor ya que no le era de buen tono su estilo de ser. Desde que se enteró que hace ya mucho tiempo, ella era para los egipcios la diosa de la fertilidad y la maternidad y, por un problema familiar, cuando sucedió la muerte violenta de Osiris, su esposo, con la ayuda del dios Anubis lo embalsamó a su difunto cónyuge, pero después, gracias a los poderes que ella poseía, lo resucitó y ulteriormente llegó a ser el rey del mundo de los muertos... Sucedió que cuando vio que el futuro era del cristianismo, velozmente mudó de tendencia dejando su estatus de diosa y pasando a ser madre de quién, en los próximos milenios dirigiría los destinos de miles de almas... Además, (Según el pensamiento del E.S.) ahora se la daba de casta y pura, pero cuando formaba parte de la trinidad egipcia con Horus y Serapis, dado el carácter libertino de alguno de sus ritos sacerdotales, aceptado de buen agrado por su pueblo egipcio pero no tolerado luego, puesto que fue prohibida en el imperio romano; oportunidad en que se pasó al cristianismo, el que lentamente estaba aflorando en el gran imperio... Ese comportamiento camaleónico le molestaba en sumo grado al E.S. no así a Jeoh y Jesús, quienes sabían aprovechar muy bien de los servicios que la mencionada les prestaba en cuanto a mediadora con los continuos pedios que les provenían desde La Tierra. Ella se encargaba de la mayoría de ellos dejando a las dos divinidades mayores con el tiempo libre para sus quehaceres diarios... Cuando se colocó la pantalla “anti-pedidos” su función menguó... pero no podían dejarla ahora sin ocupación ya que si ocupada era insoportable, sin actividad diaria les sería ciertamente insufrible, por esa razón le asignaron un sitio en el cual las preces; súplicas y plegarias le llegaban sin inconveniente alguno, de esa manera se mantenía atareada. (Por supuesto que esto era algo que ella desconocía absolutamente.)
Luego del breve trayecto ambos dioses se instalaron en las cómodas butacas que les fueran asignadas con anterioridad, estaban rodeados de otros creadores que pasarían por el mismo análisis. En la lista de examinados estaban cuartos, es decir que no debían esperar mucho para pasar al estrado a ser escudriñados por la junta de Grandes Deidades, los que verdaderamente eran dueños del universo en su absoluto e infinito conjunto de miles de millones de galaxias. No como ellos, los que apenas mantenían una diminuta región con un sistema de unos pocos planetas donde solo uno poseía vida inteligente... (Estrictamente solo eso es lo que se le permite crear a un Dios recién obtenida su licenciatura. Debo especificar aquí que entre mas de una Deidad y los abogados terrestres hay un punto de coincidencia; no obstante ser licenciados, al igual que los recién mencionados, solo con este título -Licenciado- apetecen llamarse “Doctores”, pero solo al que haya cursado el postgrado, -Curso arduo y engorroso si los hay-, solo le es lícito el mencionarse como “Doctor en divinidad“ y le es admitido acceder a lugares más cercanos al centro del sistema galáctico y tener sistemas planetarios con más de un mundo con vida intelectual...) en un lejano distrito en los suburbios de la Vía Láctea. Una galaxia, además, de cuarto orden, con solo unos cien mil millones de estrellas, cuando una gran galaxia poseía diez veces más que éstas en su haber. Claro que también las había de menor medida, pero ésas no poseían vida de ninguna naturaleza ni dioses que la comandasen, estaban ahí para la armonía cósmica, una especie de contrapeso para que no se desequilibre el sistema universal en su totalidad.
La amplia sala se está poblando de cada vez mas y mas creadores. Los acompañantes también van arribando, solo que estos se ubican en unas gradas que existen en los costados superiores del recinto. La mayoría se mantiene en silencio, solo un grupo se destaca de los demás, comen garrapiñadas; hablan sandeces en voz alta; se hacen bromas mutuamente. No obstante ser observados con desprecio por el resto de los concurrentes ellos no se amilanan en su proceder, es más... a mas de uno le espetan un agresivo: ¿Y a vos que te pasa gil...? Por supuesto que son ignorados ya que iniciar una riña en tan sacrosanto lugar es absurdo y disparatado... (La mayoría piensa: “Es una lástima que estén desactivados los milagros en este sitio, -Así lo fue desde que una vez sucedió que un Dios degradado hizo evaporar al jurado; desde esa vez, para prevenir hechos desagradables con alguien que no esté de acuerdo con la sentencia dictada se decidió, mediante un sistema electrónico muy complicado inhibir todo prodigio; maravilla; fenómeno o anormalidad cualesquiera que pudiese perjudicar gravemente a los asistentes y en especial al jurado...) ya que si así no fuera los haríamos desaparecer de inmediato...”- pero al momento coligen que de ser así ellos también podrían hacerlo y quien sabe con que milagroso portento nos atacarían...
-¡Viejo! ¡Ya está entrando el jurado...!- Dice Cristóbal en voz baja y mientras lo toca levemente con el codo a su Padre... Éste sale de la modorra en la cual estaba ingresando, deja de cabecear, se limpia con el antebrazo un hilo de baba que le cuelga de su boca y se sienta con aplomo en su butaca.
-¡Atención Señores asistentes...! – Notifica una suave; joven y serena voz femenina; una circunspección sobrenatural invade el ambiente incuestionablemente impaciente y tenso. –Con Ustedes... (La totalidad de los presentes, al momento, uniformemente se incorporó de sus asientos poniéndose de pié...) El ULTRA SACRATÍSIMO TRIBUNAL. Entran cuatro graves y circunspectas personalidades, vestidas con rigurosas togas negras, se arrellanan en sus respectivos puestos y el que parecía ser el mayor dice con solemne y grave voz, lo siguiente:
En los días anteriores hemos juzgado a dioses subalternos de sistemas planetarios secundarios que basan su química orgánica en: Boro; Silicio; Fósforo y Azufre. Elementos estos, como es bien sabido por los presentes (Eso espero... musita imperceptiblemente...) emparentados entre sí;. Por lo tanto, la vida surgida de los mismos es disímil pero no tanto como entre el Radio y el Americio, puesto que sus masas atómicas difieren mucho entre unos y otros. Hoy pasarán al estrado los creadores que utilizaron el carbono, en los días subsiguientes serán examinados los que emplearon el arsénico, mas tarde el selenio y para finalizar el teluro... No deben desconocer que en los anteriores dictámenes de sentencias, de 400 deidades quedaron solo 3 en sus cargos ya que la gran mayoría de las ex divinidades adolecían de gravísimas ineptitudes, las que los llevaron a su inmediata destitución de los cargos mantenidos hasta ese momento. –Un sudor frío corrió en los semblantes del conjunto de los asistentes... solo uno o dos se mantuvieron impávidos, (Tal no era el caso de nuestros ilustres –por lo menos hasta ese instante- conocidos...)- El motivo por el cual hoy solo se escruta a los que obtuvieron vida del carbono es para no atiborrar la sala de entidades vivientes excesivamente disímiles, puesto que, como es bien sabido por todos ustedes... (Un nuevo mutismo invade la multitud...) No es lo mismo un ser viviente derivado del carbono, cuya masa atómica es de 12,011; que uno del silicio, con m.a. de 28,0855; del azufre de 32,066 de la misma o del selenio con m.a. es de 78,96; por nombrar solo algunas... (El elocuente orador no leía, decía su discurso de memoria, es decir que era un verdadero Dr. en Divinidad. Por lo menos la tabla periódica de Mendeleiev la dominaba a la perfección. Por lo tanto, a partir de este momento pasará al estrado el primer Dios a conceptuar. Fue solemnemente citado y un extraño personaje, ubicado no muy lejos de donde ellos estaban pasó al frente. El gran jurado comenzó inmediatamente con la interpelación. Pero los dioses que ejercen nuestra consideración estaban demasiado ansiosos como para prestar demasiado cuidado a lo que sucedía en la encuesta que acontecía en esos momentos. Uno y otro estaban en una categórica concentración, una especie de estado de beatitud excluidos de todo el entorno; como si permaneciesen en otra dimensión.
Expeditamente la enunciación de sus nombres los hizo venir en sí; ya que solo necesitaban la presencia del Dios responsable de los mundos creados, debía ser uno solo el que compareciese, por tal causa Jehová se puso de pié y, con pasos firmes se aproximó al sitio donde sería examinado. (Menos mal que El Espíritu Santo no vino con nosotros; lo hubiese hecho en vano... Pensó Cristóbal...)
Tomó asiento en el taburete designado para los inspeccionados y, luego de un minucioso escrutinio visual de los examinadores una grave voz se oye se hace oír en el recinto anunciando que a continuación se le leerán las evidencias en contra del fiscalizado en cuestión... Ingresa en el estrado mayor un enigmático personaje con una lista en sus manos, se sienta frente al micrófono, lo acomoda para que el mismo quede a pocos centímetros de su boca, se coloca los anteojos bifocales, arregla los papeles en el atril para facilitar su lectura, carraspea y comienza con la locución referida.
-El Dios, a la sazón analizado, es atribuido de las siguientes imputaciones:
1) -Crear vida en el Planeta Tierra antes que el mismo estuviese listo físicamente para albergar tal estructura genética. Consecuencias de tal irresponsabilidad es que anualmente sucumben infinidad de seres por causas naturales varias, las cuales principales son: el acomodamiento de las placas geológicas subterráneas ocasionando terremotos y los furibundos y violentos movimientos de corrientes de aire denominados vendavales; huracanes o tifones; tempestades que, al igual que los primeros, ocasionan incalculables bajas en las poblaciones que los sufren. El creador del referido mundo, para insertar la vida en él, debió aguardar a que el mismo estuviese apto para alojar la sustancia vital, especialmente la inteligente. Y no lo hizo.
2) Los seres creados por Él adolecen de infinidad de irregularidades, insuficiencias que no carecen individuos elaborados por Dioses en sistemas a no mas de cuatro años luz de distancia, por lo tanto, colindantes a su región asignada. Paso a enumerarlas: ausencia del baldaquín auricular para dejar de percibir sonidos; esto produce alteraciones en el sueño: Dentadura demasiado vulnerable a las sustancias glucogenias, obrando en consecuencia en contra de tales elementos de trituración de alimentos. Organismos inermes ante infinidad de bacterias y virus especialmente creados por quien está frente a nosotros; ¿creados con qué fin...? ¿mortificar a los vivientes...? ¿Solazarse con los sufrimientos causados...?
3) Creación, nuevamente sin motivo alguno, de pulgas; garrapatas; piojos; parásitos internos; moscas; mosquitos e infinidad de seres que pareciera que su principal objetivo en la naturaleza es molestar a sus semejantes. Podría suponerse que los mismos, especialmente los últimos, sirven de alimento a batracios y reptiles; estos hubiesen podido alimentarse muy cómodamente, por ejemplo: de vegetales. Las ratas; ratones; lauchas y demás roedores, son muy molestos. Nombraré aquí también a arañas; alacranes y escorpiones, los que también son, para que decirlo, peligrosos en sumo grado... La humanidad hubiese podido arreglárselas muy bien si los mencionados especimenes.
4) Carencia en los seres inteligentes de un órgano para detectar emisiones de luz infrarrojas, (Se lo proveyó a los reptiles...) Inexistencia de otro para localizar campos eléctricos y magnéticos. (Lo otorgado a los tiburones...) Además tuvieron que pasar muchos años desde la creación para que los hombres percibieran y se dieran por enterados de tales manifestaciones.
5) Permitir sin conmoverse, la existencia de individuos extremadamente perversos; los cuales consumaron crueles exterminios de innumerables personas en todas las épocas; pudiendo, con su sola voluntad, finalizar con tales extravíos.
El listado de divinos yerros finalizó en el número 5, dejando en claro el hablante que quedaba a disposición del jurado la totalidad de la lista para poder, si los mismos lo deseaban; ser leída en privado. A continuación, a la deidad en cuestión, luego de hacerle jurar por sí mismo que diría toda la verdad y nada más que la verdad; la siguiente inquisitoria:
-¿Es Ud. el responsable de la creación del sistema solar de nueve planetas realizado en el suburbio XX/220 de la galaxia Vía Láctea...?-
- Efectivamente... Así es...-
- ¿Solo de ese sector, o de alguno más en especial...?-
- Solo de esa región-
- Entonces Ud. peca de arrogante ya que en varias oportunidades hemos podido leer que se hace pasar por el creador de todo el universo... algo infinitamente superior que ni los más prominentes y encumbrados dioses, creadores de galaxias completas y hasta cúmulos globulares, esto es grupos de galaxias, se han citado como autores de lo que no han hecho... ¡¡Y USTED SE PRESENTA COMO EL QUE LO TODO LO HIZO...!!!-
Jehová, al oír esto quedóse inmóvil es su sitio mientras que su hijo se encogía en su butaca, ni que decir de la barra que los acompañaba. Un sublime silencio acompañaba la escena...
-Nunca pensé que estaba mal que mis creados conjeturaran que era yo el que hizo todo lo existente. Desde el planeta Tierra, además del sistema solar, pueden verse muchas regiones del universo, era muy complicado para mí dar a entender que yo había hecho tal cosa y otros dioses otras... En un culto monoteísta como el que impuse eso sería una contradicción...
- Pero solo con no decirlo hubiese sido suficiente.-
Las severas y estrictas miradas de los inquisidores lo agobiaban, estaba seguro que, de seguir el interrogatorio por esos andariveles, le sería muy difícil volver a ocupar su cargo en el imperceptible sistema que le tocó en suerte.
-Ud., con su proceder sentó el precedente de que se puede erigir un sistema donde se instauró la vida inteligente siendo extremadamente irresponsable, por lo tanto este tribunal, tal como lo hizo con anteriores creadores, se retirará a deliberar el destino que le tocará de ahora en más a Ud. y sus seguidores e incondicionales y fervientes partidarios. Se levanta la sesión por cuarenta minutos; luego de dicho intervalo se dará a conocer la sentencia al investigado en cuestión...
Todos los presentes quedáronse alelados; aturdidos. Estupefactos y atónitos por la celeridad del proceso. Imaginaban que el procedimiento duraría mas tiempo del que ocupó en la ocasión el Ultra Sacratísimo Tribunal. Jehová se mantuvo impávido en su sitio; su hijo pretendió distenderse pero lograrlo le fue imposible. No obstante, luego de unos segundos se incorporó y resueltamente encaminándose hacia una de las puertas que comunicaba con uno de los recintos lindantes, en dos zancadas se pierde tras la misma sin observarse el lugar al cual comparece. La barra, (Ya no bulliciosa) que los acompañaba aprovechó los momentos de expectativa para salir, en silencio, desalentados... abatidos algunos, (Los más...) a tomar y comer algo en los despachos de bebidas y alimentos que proliferaban en los alrededores, otros a sentarse a meditar sentándose los numerosos bancos que existían debajo de los frondosos árboles del parque que circundaba el edificio principal del juzgado.
Capítulo IV
LA SENTENCIA
Paulatinamente la sala fue poblándose con los espectadores que, sin duda alguna escucharían con gran atención los resultados de la taxativa e intrínseca indagación; es decir, el inapelable pronunciamiento del Ultra Sacratísimo Tribunal. Sus rostros manifestaban ansiedad... inquietud... preocupación. Calculaban que el desenlace del asunto en cuestión los perjudicaría ampliamente; puesto que consideraban tangible que el veredicto sería inexorable en cuanto al resultado negativo del mismo. Nuevamente el Tribunal Supremo ingresa a la estrado y por segunda vez, ceremoniosamente la concurrencia, Jehová y Yisas incluidos, demostrando a las eminencias sumisión y respeto, al unísono se pone de pié. Óyese de nuevo la serena voz anunciante diciendo con extrema imperturbabilidad...
– Señores presentes... En este efímero intermedio las eminencias han decidido ya la suerte del sondeado en cuestión-
Mientras la totalidad de los presentes nerviosamente toma asiento en sus lugares, Jehová recibe la orden de acercarse al frente para recibir la sentencia definitiva. Se incorpora con parsimonia y con extrema languidez camina los pocos metros que lo separan de la irrisoria peana donde, cuando arriba a ella, impávido accede a la misma y con mirada franca observa a su sacratísimo interlocutor el que a boca de jarro le espeta lo siguiente
- Sr. Dios Jehová... ¿Está preparado para escuchar la sentencia?- Le pregunta quien, indudablemente, era el más importante del sagrado tribunal...
- Estoy preparado... lo estoy...- Responde de pié Jehová estoicamente
- Pues bien... a continuación se procederá a lectura de la misma...-
Un intranquilo murmullo invade el recinto, los presentes, con rasgos de inquietud y preocupación en sus rostros se acomodan en sus sitios preparándose para lo peor... La mayoría, de ser la sentencia desfavorable, debería volver a sus anteriores ocupaciones, esto es; a ganarse el sustento trabajando. El que le hiciera la pregunta, a continuación, ceremoniosamente y sin dejar de observarlo fijamente con una especie de regodeo en la mirada, toma asiento en su arrellanado estrado; Jehová, sin sentarse se dispone a escuchar el veredicto. Luego de unos tediosos segundos de silencio, donde un mutismo absoluto invade el hábitat accede al estrado un hierático personaje, el que, con extrema solemnidad se sitúa frente al micrófono, acomoda unos impresos en un atril, parsimoniosamente coloca sobre sus ojos unos exiguos bifocales, carraspea con displicencia y grandilocuentemente da comienzo a la lectura de la sentencia.
-En el día de la fecha, reunidos que estamos los presentes en este venerable recinto, el cual está notoriamente presidido por el ULTRA SACRATÍSIMO TRIBUNAL, y por voluntad de los nombrados, a continuación se dará a conocer el inapelable fallo emanado del mismo. Por votación unánime se declara que, visto y considerando las pruebas presentadas en la indagación que se desarrolló en la oportunidad que nos convoca; se resuelve proclamar al Dios presente frente a nosotros como... Total y absolutamente idóneo; habilidoso y eficiente en su quehacer como divinidad. Por lo tanto se lo declara apto para seguir por un millón de años mas en su puesto.
Los presentes, al escuchar la buena noticia, hacen que una algazara indescriptible invadiera el recinto, el hablante solicita silencio sin lograrlo, intenta proseguir con la lectura pero el estruendoso jolgorio le hace imposible lograr su cometido. ¡Exaltadas vivas...! ¡Impetuosas Hurras...! Todo es alegría; regocijo y exultación... Se abrazan, forman rondas entre los asientos, saltan, bailotean entre las hileras de butacas, algunos tiran bengalas y estruendosos petardos, los que producen intranquilidad entre el tribunal, hecho este que colma la paciencia de los mismos y ordena al personal de seguridad desalojar la sala. Al momento ingresa una veintena de uniformados provistos de recios bastones que, utilizando la rudeza ponen fin al bullicio y expulsan a los revoltosos fuera del recinto quedando los mismos con abundantes magulladuras y golpes en sus cuerpos. Permanecen dentro del ambiente solamente los concernidos al acontecimiento inquisitorio. Se finaliza con la lectura de la sentencia con disquisiciones burocráticas y se da por finalizado el acto. Se abrazan padre e hijo, se miran fijamente y se felicitan por el satisfactorio resultado. Jehová casi no puede creer lo acaecido, todavía no concibe que, dadas las asperezas de la experiencia pudieron, los inquisidores, emitir un veredicto propicio para su persona... Pero Cristóbal no puede dejarlo sin saber la verdad, así que sin pensarlo demasiado le confiesa lo siguiente.
-Padre... debo revelarle algo... durante el desayuno investigué en mi PC portátil sobre cada uno de los integrantes del ULTRA SACRATÍSIMO TRIBUNAL... con sorpresa compruebo que uno de ellos, el más destacado del grupo transcurrió su vida terrenal en una región al sur de América denominada “Argentina”, en dicha comarca descuella la corrupción, el soborno... el cohecho; la captación de voluntades por medio del dinero son muy comunes en esa enviciada sociedad. Por eso, al enterarme del sistema en que este magistrado se formó no tuve mas que acudir a él y ofrecerle una dádiva (Bastante significativa...) obteniendo al instante su favor en cuanto el dictamen favorable...
Luego de conocido el hecho, ambos, felices por el desenlace del acontecimiento se retiraron hacia las regiones donde son dueños y señores para proseguir por muchos años más con su autoridad absoluta, esperando que en la próxima convocatoria los mismos magistrados sean los integrantes del ULTRA SACRATÍSIMO TRIBUNAL.
FIN
