El proyecto de construir una mezquita en la zona cero de Manhattan ha recibido el apoyo de una asociación de vecinos del barrio y las autoridades consideran que ello supone un buen termómetro para medir el estado de ánimo de los ciudadanos al respecto. A pesar de que es cierto que hay que diferenciar entre el Islam y el islamismo, y entre la fe y el fanatismo, es una provocación construir una mezquita en el corazón herido del mundo libre; herido precisamente por terroristas que aprendieron a odiar a Occidente y nuestro modo de vida en mezquitas como la que ahora se pretende construir allí.
Occidente es respetuoso con todo el mundo y todas las ideas y todas las confesiones. Más concretamente, la idea sobre la que está construida América, y sobre la que se basa, es la libertad. No tenemos que demostrar nada ni mucho menos al mundo islámico. Este poso de mala conciencia que a veces tenemos no tiene ningún sentido. ¿Por qué nos odian?, se suelen preguntar los americanos. Nos odian porque somos libres y prósperos. Y nos odian los tiranos y este odio es consecuencia de su tercermundismo y de su atraso.
No deseamos la confrontación con el mal, pero medimos nuestra integridad y nuestra humanidad cuando este desafío llega y somos capaces de superarlo. La zona cero de Manhattan es el símbolo del precio que a veces hay que pagar por ser libres y es un insulto a los muertos del 11 de septiembre y a sus famílias construir allí una mezquita.
Nuestros valores no son “unos” valores, sino “los” valores. Existe una sola civilización y adquirimos la fuerza de lo que conquistamos. El mal se exitiende como una mancha y el bien retrocede cuando no nos alzamos para defenderlo. No tenemos que gustarles, tenemos que ganarles. Somos los buenos. Les gustaremos cuando ganemos.
Que conste desde ya que el proyecto de hacer una mezquita en la zona cero de Manhattan me parece una burla y una provocación absurdas, que lo único que conseguirán es aumentar el ya de por si considerable odio de los estadounidenses hacia el islam. Además, me parece una auténtica falta de respeto a los familiares de aquellos que fallecieron en el 11-S. Buscaré más información sobre este tema para añadir al hilo.
Ahora bien, el columnista autor de este artículo parece tener como misión el aumentar el odio no solo de los islamistas, que también, sino de todas las personas de todos los países subdesarrollados del mundo. Este columnista, que debería estar en un psiquiátrico para estudiar el efecto de las películas de guerra de Hollywood sobre la mente humana, dando un discurso propio de la Edad Media o de restrasados mentales como George Bush (de hecho, en un primer momento pensé que se trataba de una crítica a la forma de hablar y pensar del mismo, pero después de ver otros artículos aguantando las ganas de vomitar me convencí de lo contrario), en el que los buenos, representados por la magnánime civilización occidental que, para sacar de su inmensa barbarie a esos tercermundistas, decide invadirles, explotarles y eliminar todos los medios de producción autóctonos y suplantándolos por los de empresas extranjeras, suprimiendo de esta forma cualquier oportunidad que tenga ese país de mejorar su economía, tiene encima la desfachatez de nombrar a los dictadores de esos países, los cuales al parecer odiarían de forma incondicional a Occidente a causa de su atraso. No sabe este chupatintas que un gran número de esos dictadores fueron financiados por EEUU y otros países occidentales, los cuales les ayudaron a subir al poder. ESO también es una falta de respeto, y muchísimo más grave por la diferencia en el número de afectados, a todos aquellos que tuvieron que soportar a Pinochet, a Stroessner, a los Somoza, a Suharto, a Paul Kagame y a todos los demás dictadores apoyados por Occidente.
Y luego pasa lo que pasa, que el afgano al que han radicalizado los talibanes puestos en el poder por EEUU durante la Guerra Fría, decide coger un avión e inmolar a todos los infieles que puede para ganarse el paraíso.
Hay días en los que pienso si no nos merecemos realmente este mundo....
