Es instinctivo, porque es un mecanismo de defensa aprendido por nuestros antepasados que vivian en cuevas y empezaron a temer a esta clase de criaturas y con el tiempo estos miedos se nos transmitieron a nosotros. Esto se explica con el simple hecho de que mucha gente tiene fobia a serpientes o tarantulas, que es bastante dificil que ataquen a una persona normal del siglo 21, pero que nadie tiene fobia a las drogas o a las armas, que son mucho mas faciles de encontrar en una ciudad.xasto escribió:El miedo a las serpientes no tiene por qué ser instintivo. Creo que a esas alturas, la mujer de hoy -y a través de los medios de comunicación, sobre todo televisión y cine- tiene suficientes datos para saber que las serpientes pueden ser muy peligrosas.Antonio escribió:Interesante ¿tienes el artículo? Mientras, hay que preguntarse cómo en la madre, en la abuela y así hacia atrás, se inició la adquisición del miedo a las serpientes en el ser humano, en tanto que se ha visto que hasta las crías de mono podrían estar influidas por las reacciones de los congéneres adultos ante las serpientes (Gigerenzer & Selten 2002 p. 236). Que el bebe perciba el miedo materno y reaccione igual (mimetismo), cosa perfectamente probable, no significa que la madre, u otro antepasado, en su momento llevó a cabo un riguroso análisis lógico-racional o un estudio científico para demostrar que debía temerle o no a alguna serpiente o a todas, y así decidirlo. Por un simple principio de parsimonia esto parece imposible y de hecho, es improbable. En cambio, se podría esperar que tal proceso de aprendizaje social sea un mecanismo instintivo en sí mismo, y que el origen remoto de este miedo sea en efecto una conducta prefijada que se libera en el momento dado sin mediar procesos lógico-racionales previos y más lentos.Tontxu escribió:Sin embargo, el prejuicio intuitivo no es innato ni anterior a la razón lógica. Se ha demostrado que un bebé no se asusta de una serpiente si la madre tampoco se asusta, por el contrario si la madre padecía o expresaba temor el bebé hacia lo propio, por lo que se dedujo que los miedos (reacción intuitiva) eran inducidos y/o aprehendidos del entorno y en este caso, por mimetismo, lo contrario de innato, independiente o anterior a la deducción lógica y racional.
Hay que revisar el estudio de hecho, agradecería que lo refirieras.
Antonio
El compromiso con la realidad: una visión realista y materia
Re: El compromiso con la realidad: una visión realista y materia
Re: El compromiso con la realidad: una visión realista y materia
No se Tontxu, el experimento es poco convincente y no queda claro qué sugiere. Primero, si por un lado tenemos la misma conducta en monos, si por otro está el asunto de cómo se adquirió este miedo en un antepasado remoto humano (remontándonos hipotéticamente a un aprendizaje madre→hijo generación tras generación hacia atrás), la mejor sugerencia es que se trate de un instinto. Segundo, el experimento no parece decir nada sobre si la madre sencillamente no está fingiendo no temerle a cierta serpiente (solo aquí habría participación de algún control lógico-racional, pero aun con mediación emocional, recordemos como trabaja el cerebro), de hecho un experimento así sería un sinsentido si ponemos a la madre a jugar con una cascabel, ojo que hasta en un accidente así podría estar el origen del miedo prefijado al que apunto. (De allí que sea necesario ver al artículo técnico, el «paper».) Tercero, se sabe que aprendizajes como este, básicamente emocionales, se realizan pues emocionalmente (estímulo sensorial → fijación en sistema límbico). Así pues, tampoco está claro si aquí se buscaba demostrar que este miedo es aprendido y no innato, o en cambio demostrar que es en efecto producto de un proceso lógico-racional previo. Uno y otro caso no son la misma cosa. Hasta ahora, el razonamiento inductivo resulta innecesario.Tontxu escribió:El ensayo lo leí (no en Internet) hace años. Intentaré buscarlo en Internet, aunque lo he estado intentando y todavía sin resultados . Ahora bien, creo recordar (posiblemente en Redes, programa de divulgación científica de TV) visualice el experimento. El bebé con su madre sentados en el suelo y la serpiente acercándose (dos metros aprox. no venenosa), el niño la visualiza e inmediatamente la madre coge al reptil y lo acaricia diciendo palabras cariñosas. La respuesta del bebé es de total tranquilidad “lo desconocido” se transforma en familiar y participa con la madre de la compañía de la serpiente en perfecta armonía. Evidentemente el experimento se realiza también al contrario (otra pareja) y la reacción es la esperada, el bebé rompe a llorar. El miedo a lo desconocido es “natural”, pero está culturalmente trasmitido (aléjate de lo desconocido) que convierte la precaución en acto reflejo o intuitivo, pero no por ligereza, sino por el razonamiento inductivo, que obliga a reaccionar de una forma determinada, porque viene dado por premisas que contienen los datos de la inducción cultural. Saludos.Antonio escribió:Interesante ¿tienes el artículo? Mientras, hay que preguntarse cómo en la madre, en la abuela y así hacia atrás, se inició la adquisición del miedo a las serpientes en el ser humano, en tanto que se ha visto que hasta las crías de mono podrían estar influidas por las reacciones de los congéneres adultos ante las serpientes (Gigerenzer & Selten 2002 p. 236). Que el bebe perciba el miedo materno y reaccione igual (mimetismo), cosa perfectamente probable, no significa que la madre, u otro antepasado, en su momento llevó a cabo un riguroso análisis lógico-racional o un estudio científico para demostrar que debía temerle o no a alguna serpiente o a todas, y así decidirlo. Por un simple principio de parsimonia esto parece imposible y de hecho, es improbable. En cambio, se podría esperar que tal proceso de aprendizaje social sea un mecanismo instintivo en sí mismo, y que el origen remoto de este miedo sea en efecto una conducta prefijada que se libera en el momento dado sin mediar procesos lógico-racionales previos y más lentos.Tontxu escribió:Sin embargo, el prejuicio intuitivo no es innato ni anterior a la razón lógica. Se ha demostrado que un bebé no se asusta de una serpiente si la madre tampoco se asusta, por el contrario si la madre padecía o expresaba temor el bebé hacia lo propio, por lo que se dedujo que los miedos (reacción intuitiva) eran inducidos y/o aprehendidos del entorno y en este caso, por mimetismo, lo contrario de innato, independiente o anterior a la deducción lógica y racional.
Hay que revisar el estudio de hecho, agradecería que lo refirieras.
Antonio
PD: en cuanto lo consiga el ensayo te lo haré llegar.
Entre tanto, sigue habiendo en otros aspectos conductuales fuerte evidencia de intuitividad.
Por cierto, es una interesante discusión lingüística y filosófica esto de que, al fin y al cabo, temer (instintivamente) a una serpiente o al menos que nuestra atención quede capturada (se ha visto lo mismo ante objetos punzantes, con garras, viscosos o demasiado complejos), es en efecto una conducta adaptativamente «racional». Siendo beneficioso reaccionar rápidamente así, aquí el término no significa que se realicen operaciones mentales analíticas de por medio. Ojo, sesgo teleológico o de diseño inteligente, excluidos.
La discusión está servida.
Antonio