Setenta años después: “Ha sido una falta a la verdad”

[hond73]

Setenta años después: “Ha sido una falta a la verdad”
Los obispos vascos piden perdón por el “silencio de la Iglesia” ante el asesinato de religiosos por los franquistas.
ELPLURAL.COM

Los obispos vascos han pedido perdón por lo que consideran el "injustificable silencio de los medios oficiales de nuestra Iglesia" ante el asesinato de catorce religiosos vascos, a manos del bando franquista durante la Guerra Civil, y lamentan que ni siquiera se celebrara por ellos un funeral ni se registrara su fallecimiento.

En la entrada de la Catedral Nueva de Vitoria, donde se celebró la eucaristía, representantes de "Ahaztuak", colectivo en favor de la recuperación de la memoria histórica, se han concentrado para mostrar su apoyo a la misa, que han acogido positivamente, pero a la que no han entrado por considerar que ese templo no es el lugar más idóneo, ya que en una pared tiene esculpida un águila imperial, símbolo del franquismo.

El respaldo.
Los obispos de Bilbao, Ricardo Blázquez y Mario Iceta; de San Sebastián, Juan María Uriarte; y de Vitoria, Miguel Asurmendi, han celebrado la eucaristía con el respaldo de otros doscientos sacerdotes, en memoria de estos catorce religiosos (doce clérigos, un misionero claretiano, y un carmelita descalzo), que fueron ejecutados por el bando nacional entre 1936 y 1937.

La deuda de la Iglesia.
Familiares y amigos de los fallecidos, además de representantes institucionales, han seguido la celebración, en la que se ha leído uno a uno el nombre de los religiosos asesinados, con los que, según el obispo de Vitoria, Miguel Asurmendi, "hoy saldamos una deuda que teníamos contraída".

El silencio injustificable.
"No es justificable, ni aceptable por más tiempo, el silencio en el que medios oficiales de nuestra Iglesia han envuelto la muerte de estos sacerdotes. Tan largo silencio no ha sido sólo una omisión indebida, sino también una falta a la verdad, contra la justicia y la caridad", ha considerado Asurmendi en la homilía. Por ello, "con humildad" ha pedido perdón, en nombre de la Iglesia vasca, "a Dios y a nuestros hermanos" tras subrayar que el acto de hoy "tiene una dimensión de reparación y reconocimiento, de servicio a la verdad para purificar la memoria".

Curar las heridas.
Asurmendi ha indicado que la Iglesia vasca no busca "reabrir heridas", sino "ayudar a curarlas o a aliviarlas" para contribuir a la "dignificación de quienes han sido olvidados, o excluidos, y mitigar el dolor de sus familias y allegados".

Rechazo de la violencia.
Con la mirada puesta en el futuro, el obispo de Vitoria también ha pedido a Dios que conceda a la sociedad vasca "la luz y la fuerza necesarias para rechazar siempre la violencia como medio de resolución de diferencias y conflictos".

Los "ignorados"
Junto con el reconocimiento de hoy, se publicará en el boletín oficial de cada diócesis una reseña con los datos de la vida y muerte de los doce de ellos que "fueron ignorados", y sus nombres serán incluidos en los registros y libros parroquiales de sacerdotes fallecidos, junto a los de los dos religiosos ejecutados que sí fueron inscritos en su día.

"Nunca es tarde"
A la eucaristía ha asistido la portavoz del Gobierno Vasco, Idoia Mendia, quien ha opinado que "nunca es tarde para construir la memoria y no olvidar a las víctimas", y ha considerado que "se cierra un ciclo. Es bueno que la propia Iglesia se reconcilie con esas personas que fueron fieles a sus ideas y murieron por ellas"

Urkullu: "Respeto"
También ha seguido la celebración el presidente del PNV, Iñigo Urkullu, quien ha señalado que su presencia es una muestra de "respeto a la memoria de estos catorce religiosos, y de acompañamiento a todos sus familiares por el olvido al que se han visto sometidos".

Otros políticos en la misa.
Junto a ellos, también han asistido a la catedral la consejera vasca de Cultura, Blanca Urgüell, el miembro de la Mesa del Parlamento Vasco, Mikel Martínez (PNV), el ex lehendakari, José Antonio Ardanza, así como miembros de instituciones locales y forales.

Fuente: http://www.elplural.com/politica/detail.php?id=35931

[Shé]

El silencio injustificable.
"No es justificable, ni aceptable por más tiempo, el silencio en el que medios oficiales de nuestra Iglesia han envuelto la muerte de estos sacerdotes. Tan largo silencio no ha sido sólo una omisión indebida, sino también una falta a la verdad, contra la justicia y la caridad", ha considerado Asurmendi en la homilía. Por ello, "con humildad" ha pedido perdón, en nombre de la Iglesia vasca, "a Dios y a nuestros hermanos" tras subrayar que el acto de hoy "tiene una dimensión de reparación y reconocimiento, de servicio a la verdad para purificar la memoria".

Pues muy bien. Ni dios ni sus hermanos les van a perdonar. Nunca.

Son nauseabundas sus maniobras para mejorar su imagen. Pero es más nauseabundo aún ver a los políticos acudir como borregos y sumarse a estas gilipolleces, que nada tienen que ver con el arrepentimiento, por otra parte, ni con la memoria, ni con la decencia.

[hond73]

Los obispos vascos han pedido perdón por lo que consideran el "injustificable silencio de los medios oficiales de nuestra Iglesia" ante el asesinato de catorce religiosos vascos

Acaso no pedirán nunca perdón por las otras victimas del franquismo????

[Shé]

Obviamente no. ¡Qué cosas tienes!

Para cuando pasen los 500 años que tardaron en pedir perdón por el acoso a Galileo (de Giordano Bruno, ni mención), los muertos del franquismo con la connivencia de la iglesia estarán en el puesto 123,456.788 de su ranking de prioridades, para pedir perdón.

[Pastranec]

Por desgracia veo en esto un acto más de nacionalismo político que de pedir perdón. Se trata más de identificar a España con el franquismo que de otra cosa. ¿Por qué no piden perdón por la connivencia de la Iglesia vasca con el franquismo, y por los muertos y las persecuciones que ellos generaron? ¿Por qué no piden perdón por su connivencia con ETA? Cuando los curas vascos se negaban a oficiar los funerales y los cabos de año de las víctimas de ETA. ¡Qué huevos tiene!

[Shé]

Por desgracia veo en esto un acto más de nacionalismo político que de pedir perdón. Se trata más de identificar a España con el franquismo que de otra cosa. ¿Por qué no piden perdón por la connivencia de la Iglesia vasca con el franquismo, y por los muertos y las persecuciones que ellos generaron? ¿Por qué no piden perdón por su connivencia con ETA? Cuando los curas vascos se negaban a oficiar los funerales y los cabos de año de las víctimas de ETA. ¡Qué huevos tiene!

Triste y cierto, todo.